La pandemia vuelve a crecer en Cataluña mientras la Generalitat estudia si relaja las medidas
La velocidad de transmisión del virus, el indicador Rt, supera otra vez el umbral de control del virus y se sitúa en 1,01
Pese a las restricciones en la movilidad y la actividad que imperan en Cataluña desde el 7 de enero, la pandemia de coronavirus resiste y vuelve a crecer. Los datos aportados por el departamento de Salud de la Generalitat este miércoles indican que los contagios bajan muy lentamente, pero que la velocidad de transmisión ha superado el umbral que permite controlar el virus, y el indicador Rt se sitúa en 1,01, es decir, que por cada 100 positivos se contagian 101 personas. La tendencia, por lo tanto, está cambiando a peor, aunque es pronto para determinar cuánto durará. En este contexto, el Govern decidirá mañana si relaja las restricciones, como piden los sectores afectados, o continúa con las mismas ante el repunte del virus. Pese a las llamadas a la flexibilidad de los últimos días, la consejera de Salud, Alba Vergés, ha cambiado este miércoles el tono y ha pedido prudencia.
“La situación es la que es, y lo que vemos es que llevamos unos días de estancamiento, con lo que nos aumenta el riesgo de rebrote. En base a esto se tomarán las mejores decisiones posibles”, ha avisado Vergés. Que la pandemia vuelva a crecer pese al gran esfuerzo que están haciendo los sectores afectados por las medidas de contención del virus es un jarro de agua fría. Además de las medidas que afectan a toda la ciudadanía como el toque de queda o las limitaciones en las reuniones, un sector como el de la hostelería arrastra restricciones graves desde el mes de octubre, y el pasado 7 de enero se impusieron fuertes medidas también a los demás sectores, especialmente al comercio. El Govern vive en esa tensión permanente de encontrar el equilibrio entre imponer las medidas que ayudan a que el virus retroceda, y abrir la mano para dejar respirar a los sectores afectados.
Las medidas vigentes expiran a finales de esta semana, y este jueves, el Procicat tiene que decidir qué restricciones se impondrán a partir del lunes. El secretario de Salud Pública, Josep Maria Argimon, admitió el martes que hay que “dar aire” a los sectores afectados, pero Vergés se ha mostrado este miércoles más prudente. “La epidemia no se ha acabado, y llevamos unas semanas complicadas en este sentido. Estamos en un camino que nos puede llevar a cambiar el escenario, al tener a más personas vacunadas y a dejar atrás el invierno, pero a la vez no estamos en una situación de plantear una desescalada como muchos querríamos”, ha dicho la consejera en un acto del Hospital Clínic de conmemoración del aniversario del inicio de la pandemia en Cataluña. “Las UCI están todavía muy llenas, la tensión en el sistema sanitario es evidente, y por lo tanto tenemos que ser prudentes”, ha advertido Vergés en referencia a lo que se puede esperar a la reunión del Procicat mañana. “Dar aire es importante”, ha admitido, “pero estamos intentando asegurar no lo que pase en los próximos días, sino en las próximas semanas”.
El departamento de Salud está estudiando cómo afectan las variantes del virus (especialmente la británica, que supone el 40% de los nuevos casos, pero también la brasileña y la sudafricana) en este repunte del virus. “Estamos mirando de qué manera nos hacen cambiar las curvas. De momento estamos en un estancamiento, y tenemos que ver cómo se traslada esto en los otros indicadores”, ha destacado Vergés. La consejera defiende que Cataluña todavía está en fase de bajada de los contagios si se compara con la última semana, aunque si se mantiene el cambio de tendencia en la Rt, que vuelve a subir, es previsible que en los próximos días vuelvan a aumentar también los positivos y, como consecuencia, vuelva a impactar en los hospitales, que en los últimos días habían rebajado tímidamente la presión.
Según los datos aportados por el departamento de Salud, en las últimas 24 horas se han notificado 3.178 positivos (la media diaria de los últimos siete días es de 1.438 contagios) y 53 muertes. La presión hospitalaria se reduce ligeramente, y en Cataluña hay 1.918 pacientes de covid 19 ingresados, 55 menos que el día anterior. 587 de estos pacientes están en la UCI, seis menos que el día anterior. Pese a bajar un poco los contagios y las hospitalizaciones, los indicadores que muestran cómo se comporta el virus en la comunidad vuelven a crecer: la Rt está en 1,01 y la positividad (el porcentaje de las pruebas PCR y antígenos que dan positivo) es del 5,46%, tres centésimas más que ayer y por encima del 5% que recomienda la OMS. El riesgo de rebrote crece por cuarto día consecutivo y se sitúa en los 273 puntos (a partir de 100 se considera alto). Y la incidencia acumulada en los últimos 14 días es de 277 por cada 100.000 habitantes, igual que el día anterior.
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