_
_
_
_
_
TRÁFICO DE DROGAS

Prisión para los tres mossos acusados de traficar con droga decomisada

Los policías están suspendidos de su trabajo y seguirán cobrando el sueldo base hasta que se les juzgue

Una pareja de Mossos en Barcelona.
Una pareja de Mossos en Barcelona.Albert Garcia

El juzgado de Instrucción 1 de Santa Coloma de Farners (la Selva) ha decretado la prisión provisional comunicada y sin fianza para un cabo y dos agentes de los Mossos d’Esquadra y un vecino de Santa Coloma de Farners que fueron detenidos este jueves por Asuntos Internos acusados de estar implicados, presuntamente, en un trama de tráfico de drogas. La causa está abierta por los delitos contra la salud pública, organización criminal, descubrimiento y revelación de secretos, tenencia ilícita de armas –porqué el cabo tenía un arma no registrada- y falsedad documental cometida por un funcionario público. Los detenidos se han acogido a su derecho a no declarar y sólo han contestado a preguntas de sus abogados a efectos de acreditar el arraigo. La mujer del traficante, que también fue detenida y se dejó sin efecto su detención, pasará ante el juez cuando sea citada.

La investigación de los tres policías de Investigación de la comisaría de Santa Coloma empezó el año pasado tras la denuncia de un traficante encarcelado. Según detalló a la División de Asuntos Internos (DAI), la trama de los policías compinchados con traficantes para vender droga incautada empezó 3 o 4 años antes. Les denunció, presuntamente, tras hacer tratos con ellos y sentirse que no le habían protegido. Al principio la DAI creyó que el preso mentía y lo hacía por venganza, sin embargo al ir contrastando las llamadas y datos que les daba, vieron que era cierto y estarían falseaban los atestados y vendiendo la droga. Se les investiga además por descubrimiento y revelación de secretos porqué habrían consultado bases de datos policiales para tener información de otros traficantes y evitar que fueran competencia.

Ante la presencia de indicios claros de la comisión de delitos, a principios de año la DAI llevó el caso al juzgado y el juez acordó la intervención de los teléfonos, balizas de seguimiento y microfonar los dos vehículos policiales utilizados por los investigados. A pesar de que usaban un doble lenguaje e iban con cuidado para no ser descubiertos, las escuchas permitieron saber sus movimientos e incluso las cantidades que sacaban por la droga que luego se repartían. Así, a pesar de que el estado de alarma frenó la investigación, las medidas adoptadas permitieron obtener pruebas de su actividad ilícita. Según la DAI, el cabo y uno de los agentes eran los encargados de sacar la marihuana de la comisaría, -sacaban cantidades que no pudieran levantar sospechas o mayores cantidades que sustituían por droga en mal estado-. El otro agente y el presunto traficante se dedicaban a ir a venderla a Girona.

Una de las operaciones en que les tenían vigilados se hizo a finales de julio. Los investigados hicieron una entrada y registro en una masía y desviaron 3 kilos de marihuana incautada por la que sacaron 7.000 euros. El otro operativo tuvo lugar el pasado día dos. Agentes de Tráfico habían comisado 160 kg de marihuana que fueron almacenados en un contenedor en la comisaría de Santa Coloma. La DAI, a través de las escuchas, supo que pretendían mover la droga. El miércoles las cámaras de la comisaría gravaron al cabo sacando 5 bolsas oficiales con droga del contenedor y tirándolas al coche de uno de los agentes. Subieron al coche y la llevaron a casa del otro agente. Al salir solo llevaban una bolsa y la fueron a tirarla a la desechería simulando haber destruido la droga. Sin embargo Asuntos Internos encontró las otras cuatro bolsas en el interior de la primera.

El otro agente entregó la droga al traficante, que se la llevó a una finca de su propiedad. La DAI la registró y halló una plantación y los cogollos presuntamente procedentes de la comisaría. También les han descubierto un alto tren de vida. Entre otras, el cabo habría pagado en metálico cerca de 20.000 euros, además de una piscina en “b”. Ahora las declaraciones que tomarán a diversos testigos y el análisis de sus cuentas bancarias permitirán saber si el dinero salió del banco. La investigación sigue abierta ya que podría haber otros traficantes implicados. Los policías están suspendidos y seguirán cobrando el sueldo base hasta que se les juzgue.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_