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La Generalitat externaliza el seguimiento de contactos de positivos de coronavirus

El Departamento de Salud adjudica a Ferrovial un contrato de 17,6 millones de euros

112 Cataluña
Personal telefónico del Servicio de Emergencias Médicas de Cataluña.MASSIMILIANO MINOCRI (EL PAÍS)
Cristian Segura

La Generalitat ha externalizado en Ferrovial el seguimiento telefónico de los contactos de personas que han dado positivo de covid-19. El contrato, adjudicado por el Servicio de Emergencias de Cataluña (SEM), asciende a 17,6 millones de euros y ha sido concedido sin concurso, amparándose en las medidas de emergencia del estado de alarma. Ferrovial es la empresa que también gestiona en Cataluña el teléfono público de consultas sanitarias 061.

La resolución que aprueba la externalización de este servicio, avanzada por El Confidencial, justifica la decisión a partir de los decretos ley aprobados por la Generalitat que autorizaban con el estado de alarma “medidas urgentes de contratación pública” para hacer frente a la pandemia. Ferrosal, filial de Ferrovial, asume desde este junio el seguimiento telefónico de los contactos de las personas que hayan dado positivo de la covid-19. El contrato de Ferrovial se enmarca en un nuevo programa del Departamento de Salud, anunciado el pasado 2 de junio, de estudio epidemiológico del coronavirus. La resolución no precisa el periodo de vigencia del contrato pero sí indica que el servicio que dará Ferrovial consistirá en realizar dos o tres llamadas a las personas en observación durante una cuarentena de catorce días. Este nuevo programa de lucha contra el coronavirus tiene una duración de dos años, prorrogable a tres, y supone una inversión extraordinaria para el reclutamiento de 108 efectivos de personal sanitario.

El PSC ha reclamado este viernes al Govern, mediante instancia parlamentaria, más información sobre el acuerdo con Ferrovial. La diputada socialista Assumpta Escarp opina que los 17,7 millones de euros no están debidamente justificados y añade que es “incomprensible” que los centros de atención primaria solo reciban 4,5 millones de euros para reforzar su función como identificadores de nuevos positivos. Escarp también cuestiona que no sea el equipo del 061 el que asuma la función de monitorización de contactos. Un portavoz del Departamento de Salud explica que al ser Ferrovial la compañía que presta el servicio de teleoperadores del 061, “se consideró que era la empresa que con más capacidad y facilidad podía responder a esta contratación de emergencia”. La consejería que lidera Alba Vergés precisa que los empleados de este servicio de monitoreo son estudiantes de enfermería y de medicina. Actualmente hay 200 en activo con la previsión de elevar esta plantilla a 900 personas, dependiendo de la evolución de la pandemia, según la Generalitat, lo que elevaría el coste anual del equipo de los 9 millones de euros actuales a 18 millones, que es el valor de la adjudicación de Ferrovial.

Segunda ola, a partir de octubre

Escarp considera que la externalización de Ferrovial es opaca porque se desconoce su periodo de vigencia. El informe que fue presentado por el SEM para acompañar la resolución de contratación, y al que ha tenido acceso EL PAÍS, también incluye previsiones del Departamento de Salud para una segunda ola de coronavirus, a partir de octubre, “con la mitad de intensidad de la primera”. Estos datos indican que la media de nuevos positivos diarios detectados hasta el 5 de octubre puede ser de 300 personas; a partir del 19 de octubre, el incremento de nuevos positivos irá aumentando, hasta un máximo de 1.500 nuevos casos a principios de enero de 2021, cinco veces más. Las estimaciones de la Generalitat apuntan a un progresivo retroceso del virus a partir de finales de enero y un retorno a cierta normalidad en abril de 2021.

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Sobre la firma

Cristian Segura
Escribe en EL PAÍS desde 2014. Licenciado en Periodismo y diplomado en Filosofía, ha ejercido su profesión desde 1998. Fue corresponsal del diario Avui en Berlín y posteriormente en Pekín. Es autor de tres libros de no ficción y de dos novelas. En 2011 recibió el premio Josep Pla de narrativa.

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