Pablo Casado asistirá a la manifestación de Colón con Vox contra los indultos

De la ruptura con Vox en la moción de censura en octubre de 2020, a la manifestación con Vox en junio de 2021. El PP ha decidido arriesgarse a una nueva foto de Colón para no dejar que la extrema derecha capitalice la oposición a los indultos al procés. Pablo Casado asistirá a la protesta en la plaza de Colón de Madrid el próximo día 13 de junio. El líder del PP compartirá ese día acto con Santiago Abascal por primera vez desde la moción de censura en la que rompió con él, aunque el PP tratará de evitar una foto conjunta con espacios diferenciados en la plaza. Los populares lanzan esta semana la recogida de firmas.

El PP sigue mirando por el retrovisor a Vox y reacciona ante el temor de que la extrema derecha gane vuelo gracias al rechazo transversal de una parte de la sociedad española a los indultos a los líderes independentistas. De ahí la decisión del comité de dirección de los populares, en el que existían voces discrepantes, de que Casado acuda personalmente a la manifestación de Colón junto al líder de Vox y dirigentes de Ciudadanos. Casado estará en Colón, pero el PP intentará rehuir la fotografía junto a Abascal, como en la maldita foto de febrero de 2019 tras la que el PP se hundió en las elecciones de abril a 66 escaños y Ciudadanos estuvo cerca de superarle en las urnas con 57 diputados. Vox fue el mayor beneficiado de la protesta de hace dos años —entonces era extraparlamentario, y dos meses después consiguió 24 asientos en el Congreso—, pero el PP cree que ahora lo más importante es no dejarle el campo libre. Por eso opta por volver a compartir acto con los ultras.

El PP va a la ofensiva para achicar el hueco a la extrema derecha y lanza esta semana la campaña de recogida de firmas por todo el país contra los indultos. Los populares salen ya a la calle con mesas petitorias en las que estarán todos los cargos públicos del PP explicando por qué se oponen a la medida de gracia. Casado no va a dejar respiro al Gobierno e inicia una ofensiva de desgaste contra Pedro Sánchez, insistiendo día a día en el mensaje de que los indultos son “un pago político” de Sánchez a sus socios de ERC y, como dijo ayer el secretario general del PP, el presidente del Gobierno escribirá “una de las páginas más tristes de la democracia española” y “reescribirá la sentencia” del Tribunal Supremo. Los populares irán a todas las protestas que se convoquen en la calle contra los indultos, con independencia de “a quién le guste o quién se sume”, dijo este lunes Teodoro García Egea.

Ahora bien, el PP se ha visto arrastrado a la plaza de Colón sin quererlo. La dirección había decidido la semana pasada no llevar la protesta contra los indultos a las calles, salvo por la recogida de firmas. El error de cálculo estuvo en no prever que alguien podría convocar una manifestación, como así ha sucedido. La convocatoria de la plataforma de Rosa Díez, en la que están figuras próximas al PP, como la expresidenta del partido en el País Vasco María San Gil o el exdiputado del PP en esa comunidad Carlos Urquijo, —y a la que rápidamente se sumó Vox— les puso en una tesitura complicada. La mayoría de la dirección se ha convencido de volver a compartir protesta con los ultras ante una pregunta: ¿cómo explicaría el PP no ir?

La decisión compromete la estrategia centrista que había iniciado Casado tras la moción de censura y que le había permitido recuperar el grueso de los votos de Ciudadanos. En la dirección defienden una nueva foto de Colón ya no tiene tanto desgaste. “Este es un tema de fondo muy gordo, es algo que une a millones de españoles. ¿Por qué no va a ir el PP? El Gobierno está intentando insistir en la foto de Colón y en eso del trifachito, pero lo que vale una vez no vale una segunda. El problema de la foto de Colón la primera vez es que faltó explicación, pero ahora el efecto está descontado”, defiende una dirigente. Casado ha dejado libertad para asistir o no ante la incomodidad de algunos dirigentes con la extrema derecha. En Génova son conscientes de que el líder de Vox intentará forzar la foto conjunta y no será tan sencillo esquivarla. Por su parte, la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, sugirió que también asistirá a la manifestación.

“Gobierno de salvación nacional”

El PP sigue instalado en la euforia tras las elecciones en Madrid y el vuelco demoscópico que le sitúa ahora por delante del PSOE en las encuestas. En ese contexto, Pablo Casado habla ya de cómo sería su Gobierno, aunque no haya elecciones a la vista y el mensaje que reitera el Gobierno de Pedro Sánchez es que agotará la legislatura. El líder del PP ha contado este lunes al Financial Times que apostaría, en caso de llegar a La Moncloa, por constituir un “Gobierno de salvación nacional”, al estilo del de Mario Draghi en Italia. Ese Ejecutivo estaría formado no solo por conservadores, liberales y demócratas cristianos, sino también por exsocialdemócratas, explica, y sin dar entrada a Vox. Casado asegura que su intención es gobernar en solitario y que el PP “no es parte de un bloque con Vox”, aunque luego evita, según el periódico británico, contestar a la pregunta sobre si Vox es o no un partido democrático.

Ese Gobierno liderado por Casado llevaría a cabo un plan de reformas en los tres primeros meses, afirma el líder del PP, entre los que incluye una bajada del impuesto de la renta y de sociedades, la supresión del impuesto de sucesiones, una reforma de la indemnización por despido “para mejorar la flexibilidad del mercado laboral” y un ajuste en el sistema autonómico, sobre el que no profundiza.