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Niños en el coche: 10 consejos para que viajen seguros

El cuerpo de un menor no es igual que el de un adulto y por ello es más vulnerable cuando va en un automóvil. En los accidentes, suelen sufrir lesiones de cuello, cráneo y abdomen

Un bebé viaja en su sillita del coche.
Un bebé viaja en su sillita del coche.Unsplash
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Tras el fin del confinamiento por la pandemia y la llegada de las vacaciones de verano, regresamos con ganas de recuperar la movilidad y de disfrutar de viajes y excursiones en coche con los niños. Llevar el cinturón de seguridad y un sistema de retención infantil o silla adecuada y bien instalada en el vehículo son cuestiones que pueden determinar que un niño salve la vida en caso de accidente o que tenga lesiones menos graves. El cuerpo de un niño no es igual que el de un adulto, sus proporciones entre cabeza, cuello y tórax son diferentes y está en proceso de desarrollo físico. Por ello, necesita sistemas de protección en el coche adaptados a su tamaño y peculiaridades. “En los menores de dos años, las lesiones más frecuentes son las de cuello, las de cráneo entre los dos y cuatro años y las de abdomen entre los cuatro y diez años”, explica María Jesús Esparza Olcina, miembro de la Alianza Española para la Seguridad Infantil, AESVI  y miembro de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap).

Durante el año 2018, fallecieron en España 25 niños menores de 14 años por accidente de tráfico, según los últimos datos de la Dirección General de Tráfico (DGT). La utilización adecuada de los sistemas de retención para los niños en los vehículos, como cinturones de seguridad o sillas adaptadas a cada edad “evita que los pasajeros salgan despedidos fuera del vehículo, que colisionen entre sí y distribuye la energía del impacto en el cuerpo hacia órganos que no son vitales, dirigiéndola a las zonas donde están los puntos de contacto con el cuerpo del arnés o el cinturón, como los hombros. Además, se reduce el impulso de la inercia de los ocupantes tras el impacto”, explica María Jesús Esparza.

Cuando un biberón puede ser un arma letal en el coche

El equipaje y todos los objetos que llevamos en un vehículo, incluso los más pequeños y aparentemente inofensivos, como un biberón, pueden resultar peligrosos al impactar contra los ocupantes del coche y provocar graves lesiones. “Todos los objetos que están en el interior del vehículo se desplazan a la misma velocidad que este, lo que genera una inercia que hace que nos golpeen con una fuerza equivalente a multiplicar su peso por 40, incluso cuando se circula a una velocidad de 50 kilómetros por hora. Un ordenador portátil, una tablet, un biberón o un móvil se convierten en auténticos proyectiles. Por este motivo, es muy importante colocar todos los objetos en el maletero o en departamentos cerrados, como la guantera”, añade Esparza.

Un sistema de retención infantil colocado en la posición incorrecta o mal instalado deja de cumplir la función de protección del niño dentro del vehículo en caso de accidente. “El Sistema de retención infantil se debe utilizar siempre, independientemente de lo que dure el recorrido, no es excusa que la distancia sea corta, o que se realice por el interior de un pueblo y a velocidades más reducidas. Las colisiones en esas situaciones también pueden producir lesiones muy graves”, comenta Elena Valdés Rodríguez, asesora médico de la Dirección General de Tráfico.

En la prevención de las lesiones infantiles por accidente de tráfico “es fundamental el ejemplo de los adultos. Si los padres se ponen el cinturón de seguridad, el niño entenderá mejor la necesidad de utilizar el sistema de retención infantil y cuando sea adulto tenderá a ser más responsable al volante. Esto es útil, también, cuando se trata de llevar casco en la bicicleta, con el monopatín o cuando esquían”, añade Valdés.

Los accidentes de tráfico son la primera causa de muerte en el mundo y “la mejor forma de evitarlo es la prevención. Para conseguirlo, es útil implicar a los propios niños en su seguridad cuando vial y la de los adultos de su entorno. Por ello, hemos llevado a cabo recientemente la iniciativa de un cuento, que se puede descargar de forma gratuita, para explicar a los niños de forma divertida y amena cómo viajar sobre ruedas de forma segura”, explica Antonio Lucas, director de Seguridad Vial del Real Automóvil Club de España (RACE).

El calor en el coche, un riesgo para la vida de los niños

Además de los accidentes, otro riesgo para los niños en los coches es el calor. Un vehículo puede alcanzar, en poco tiempo, temperaturas muy elevadas. Por ello “Nunca hay que dejar a un bebé o un niño solo dentro de un coche. En solo 30 minutos, el interior de un vehículo alcanza el doble de la temperatura que hay en el exterior. En caso de encontrar a un niño desatendido dentro de un vehículo hay que llamar urgentemente al teléfono de emergencias, 112”, concluye Lucas.

Decálogo para proteger la vida de los niños en los coches

  1. Llevar siempre al niño sujeto en un sistema de retención infantil adaptado a su tamaño y peso. Nunca dejar al niño sin la supervisión de un adulto en el coche.
  2. Utilizar siempre sillas homologadas. Comprobar la etiqueta de homologación, en la que se debe indicar la talla y/o el peso para los que se ha fabricado el producto.
  3. Acudir a un centro especializado donde se asesore sobre las necesidades del niño y las características de cada silla y su instalación. Conviene leer detenidamente las instrucciones y guardarlas para futuras consultas, cerca de la silla, por si necesitan ser utilizadas de nuevo, como en el caso de que los servicios de emergencia tengan que desmontar el dispositivo en caso de accidente.
  4. Evitar las sillas de segunda mano. Tras un accidente, la silla debe ser sustituida. Existe una campaña denominada Jané Renew, a través de la que renuevan de forma gratuita la silla infantil del coche por una nueva en caso de accidente.
  5. El vehículo y la silla infantil actúan de forma conjunta, por lo que antes de comprar la silla, hay que verificar que el sistema de anclaje del coche se adapte a la silla.
  6. Colocar siempre al niño en las plazas traseras del vehículo y subirlo y bajarlo por la parte segura de la vía, como la acera. Si solo se puede colocar en la plaza delantera, se debe desconectar el airbag delantero, en caso de que la silla se instala en sentido contrario a la marcha.
  7. Es recomendable llevar al niño en sentido contrario a la marcha el mayor tiempo posible que permita la silla, según las instrucciones. Los arneses deben colocarse sin holgura; bien adaptados al cuerpo del niño.
  8. Resulta aconsejable que los niños de más edad utilicen sillas con respaldo al menos hasta los 135 centímetros de estatura, ya que proporciona más protección frente a los impactos laterales, y mejoran la eficacia del cinturón de seguridad.
  9. Evitar viajar con objetos sueltos en el vehículo o colocar equipaje o mascotas en el vehículo al lado de los pequeños.
  10. En caso de accidente y, siempre que sea posible, hay que sacar al niño del coche accidentado en su sistema de retención infantil, y nunca en brazos, salvo riesgos inminentes.

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