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EL ACENTO
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

Las ocho fracturas del Brexit

Queda menos para la salida o queda menos para Boris Johnson, porque el Brexit nos entierra a todos

Berna González Harbour
Boris Johnson y el ministro para Irlanda del Norte, Julian Smith, la semana pasada en Belfast.
Boris Johnson y el ministro para Irlanda del Norte, Julian Smith, la semana pasada en Belfast.AFP

El Brexit se supera, sigue quemando todo lo que toca y genera cada día traumatismos nuevos por el frívolo referéndum cuyos organizadores, como dijo un líder europeo, ni siquiera tienen sitio en el infierno.

La nueva fractura en el casco se ha puesto en evidencia esta semana en el polvorín irlandés, donde una salida sin acuerdo como la que contempla Boris Johnson puede provocar la pérdida de decenas de miles de empleos, el colapso de la ganadería y agricultura del Ulster y cargarse tres puntos del PIB de Irlanda. Por no hablar del golpe psicológico de una resurrección de la frontera derribada con el acuerdo de paz de 1998, una gran historia de éxito colectivo que los tories están enviando al desván.

El nuevo premier británico pasó por Belfast esta semana sin soluciones en el bolsillo, y su homólogo irlandés ya ha alertado de la grave situación económica que se avecina, con importantes implicaciones para la seguridad. Todos deben estar preparados, dijo Leo Varadkar.

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La mayoría de los norirlandeses votaron contra el Brexit, conscientes de que cualquier cambio puede reavivar la vieja reivindicación de unificación de la isla que quedó neutralizada con el acuerdo de paz. Los ánimos también hierven en Escocia, donde el apoyo a la independencia crece hasta el 53% y se recupera la idea de un nuevo referéndum para, una vez separados de Reino Unido, emprender de nuevo la vía hacia la integración europea. Y en Gales ya se preparan protestas.

El referéndum del Brexit dividió profundamente a la población y ya se sabe que no hay quien reconstruya unos huevos rotos. La fractura no solo sigue entre los partidarios del sí y del no (1). Sino que sangra entre Escocia e Inglaterra (2), entre Irlanda del Norte y Londres (3), entre el Belfast unionista y Dublín (4), entre Gales y Londres (5), entre tories críticos con Johnson y los hardliners que apoyan el choque total con la UE (6); entre laboristas que urgen a un segundo referéndum y los que han rendido las herramientas políticas antes de que empiece la batalla (7). Además de la obvia entre ambos lados del canal (8).

Quedan menos de tres meses para una eventual salida sin acuerdo y, posiblemente, también queda menos para Boris Johnson. Porque la única certeza es que el Brexit nos entierra a todos.

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Sobre la firma

Berna González Harbour
Presenta ¿Qué estás leyendo?, el podcast de libros de EL PAÍS. Escribe en Cultura y en Babelia. Es columnista en Opinión y analista de ‘Hoy por Hoy’. Ha sido enviada en zonas en conflicto, corresponsal en Moscú y subdirectora en varias áreas. Premio Dashiell Hammett por 'El sueño de la razón', su último libro es ‘Goya en el país de los garrotazos’.

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