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Tener menos de 1.000 habitantes puede parecer una situación idílica para muchos si lo que se busca es huir del enjambre humano de las megalópolis, pero por desgracia, en muchas de las provincias españolas esta cifra es una mala noticia. Según la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), <a href="http://femp.femp.es/files/566-2117-archivo/20170125%20informe_despoblacion.pdf" rel=”nofollow” target="_blank">el 50% de los municipios españoles está en riesgo de extinción</a>. Es decir, pueblos y localidades destinados a desaparecer, ya que se mueren más personas de las que nacen, y el movimiento migratorio es de salida y casi nunca de entrada. Razones hay muchas. Como apunta Rosario Sampedro, doctora en Sociología y profesora del departamento de Sociología y Trabajo Social de la Universidad de Valladolid, "cuando una población está desequilibrada por edad y sexo, <b>la capacidad de desarrollo económico y cultural se resiente</b>. No hay suficiente gente que se haga cargo de las actividades económicas, ni que cuide y atienda a las personas dependientes, ni que tenga la suficiente motivación para hacer planes y proyectos de futuro. Eso genera un círculo vicioso, de forma tal que el deterioro de las condiciones de vida y de las expectativas de futuro genera más despoblación". </br>El otro día conocimos el caso de Albinen, <a href="https://elpais.com/internacional/2017/11/26/mundo_global/1511693870_421621.html" target="_blank">el pueblo suizo que paga 21.300 a quienes se instalen en él. Estos otros seis pueblos y ciudades también están dispuestos a revertir la situación y le ofrecen dinero si se muda a vivir con ellos: entre 5.000 y 9.000 euros.
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13.000 euros por mudarse a Canadá o un sueldo de 800 por irse a Holanda: aquí pagan por vivir

Estos seis lugares quieren que sea su vecino

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