Sustos, tiroteos y atracos sorprenden a atletas y periodistas en Río
La policía ha ocupado la región con 85.000 agentes para controlar la Villa Olímpica
El estigma de la violencia en Río de Janeiro ha empañado la celebración de los Juegos Olímpicos. Los 85.000 agentes de policía que han invadido la región no han logrado evitar los tiroteos y los atracos en la Villa Olímpica y algunos deportistas se han visto envueltos en las amenazas que acosan a esta ciudad brasileña;como la selección china de baloncesto, que vivió un tiroteo el pasado viernes, al poco tiempo de su llegada a Brasil.
El clima de inseguridad que se respira ha aumentado desde que comenzaron los Juegos. Prueba de ello fue la detonación del pasado sábado de una mochila abandonada que estaba en las proximidades de una carrera ciclista en Copacabana. Una inseguridad que llegó también el pasado domingo a la sala de prensa del centro de hípica, cuando una bala perdida impactó en el techo.
