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El presidente de Gucci y su directora creativa abandonan la marca

Patrizio di Marco y Frida Giannini abandonan la firma, cuya cifra de negocios cayó en 2013 un 2,1% hasta los 3.560 millones de euros

Carmen Mañana
Frida Giannini y Patrizio di Marco en una gala celebrada en Los Angeles en enero de 2014.
Frida Giannini y Patrizio di Marco en una gala celebrada en Los Angeles en enero de 2014.CORDON PRESS

Atención: hay un puesto vacante en Gucci. La directora creativa, Frida Giannini, y su presidente, Patrizio di Marco, abandonan la marca, según ha informado hoy en un comunicado el grupo Kering, propietario de la casa italiana.  

Giannini y Di Marco, que son pareja y padres de una niña llamada Greta, dejarán sus puestos de forma escalonada. El actual presidente lo hará el 1 de enero tras seis años en el cargo, y será sustituido por Marco Bizzarri, otro hombre fuerte de este conglomerado del lujo: nombrado director ejecutivo de las divisiones de alta costura y productos de piel el pasado abril, ocupó previamente el puesto de consejero delegado en dos de las marcas insignia del grupo, Bottega Veneta (desde 2009) y Stella McCartney (2005).

Giannini abandonará su puesto tras el próximo desfile de la casa el 25 de febrero. Todavía no se ha anunciado quién será su sustituto

La directora creativa, por su parte, aguantará hasta el próximo 25 febrero. El tiempo justo para presentar la última colección en la que está trabajando -otoño/invierno 2015- en la Semana de la moda de Milán. A diferencia de lo sucedido en el caso de Di Marco, Kering todavía no ha anunciado quién sucederá a Gianinni, lo que abre la puerta a las quinielas y la especulación, uno de los entretenimientos favoritos en los llamados mentideros de la moda, ya sean estos digitales o analógicos.

La diseñadora entró a formar parte de Gucci en 2002, dos años después fue nombrada responsable de la línea de complementos, y, en 2005, asumió también la dirección de la división del ready to wear tras la marcha de la hasta entonces directora creativa, Alessandra Facchinetti. Giannini, convertida hoy en una de las mujeres más poderosas de la industria de la moda, cumplió la difícil misión de convertir a la marca en el emblema del mass luxury (lujo de masas) de Kering, tal y como la definió la periodista Vanessa Friedman en The New York Times. Es decir, la firma best seller frente otros productos más elevados y exclusivos del catálogo del conglomerado como Bottega Venta. El motor económico del grupo. Durante años, la firma mantuvo un crecimiento anual próximo al 20%, convirtiendo la etapa Giannini en la más exitosa de la historia de Gucci. Por encima de la de Tom Ford, el hombre que devolvió la casa a la primera línea del lujo en los noventa. 

Pero las últimas colecciones de la italiana despertaron críticas tibias y las ventas corroboraron la opinión de los expertos. La cifra de negocios de Gucci cayó en 2013 un 2,1% respecto al año anterior, hasta los 3.560 millones de euros, según informa Efe.

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Kering no explica en su comunicado los motivos de esta salida, pero sí incluye las consabidas buenas palabras y agradecimientos de su director general François-Henri Pinault, que destaca "la extraordinaria pasión y dedicación" de la diseñadora. "Giannini ha sido fundamental en el reposicionamiento del universo Gucci más allá del diseño, desarrollando la arquitectura y los interiores de las tiendas de la marca y poniendo en marcha el Museo Gucci en Florencia", añade.

Además, la italiana ha abanderado los ambiciosos proyectos filantrópicos en los que la casa se ha volcado en los últimos años, como la fundación Chime for Change. Una iniciativa que con Beyoncé y Salma Hayek en calidad de embajadoras desarrolla programas educativos y sanitarios centrados en mujeres en peligro de exclusión.

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