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Diez lugares para ver la lluvia de estrellas en primera fila

Una playa de Cádiz o un castillo de Valencia. Usted pone el deseo y nosotros le sugerimos el entorno

CORDON

Si se encuentra en mitad de la noche y ve el cielo despejado, contémplelo con calma y, por si acaso, tenga preparado un deseo. Quizás haya suerte y se le aparezca una estrella fugaz con la que probar fortuna. Las Perseidas, popularmente conocidas como las Lágrimas de San Lorenzo, atraviesan el cielo en los primeros días de agosto. Este año, su mayor actividad tendrá lugar entre el los días 12 y 13. No se las pierda.

“En su observación, influyen factores como la cantidad de restos del cometa y su dispersión, lo que provoca que haya más o menos estrellas fugaces”, contó a BUENAVIDA Alfred Rosenberg, astrofísico y divulgador del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC). El experto, al hablar de las perseidas, estrellas fugaces que se dejan ver en verano, destacó que, para vislumbrarlas lo mejor es alejarse de la contaminación lumínica (a más oscuridad, mejor). Y cuanto más arriba mire, más opciones tiene de encontrarse con una. Ocurre lo mismo con sus menos conocidas hermanas.

“Es importante llevar una toalla o esterilla para tumbarse, ropa de abrigo y un termo con bebidas calientes, pues por la noche refresca y pueden producirse hipotermias”, señala Pablo González de Prado, biofísico de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y miembro de la Agrupación Astronómica Antares, también en Madrid. Otro aspecto clave es la actitud. “Lo suyo es aprovechar la excusa y tumbarse a ver el cielo, como mucho con prismáticos; y que, de vez en cuando, aparezca el premio de la estrella fugaz”, añade.

Recordamos diez lugares para disfrutar, con excelencia, del fenómeno:

1. El Torcal de Antequera (Antequera, Málaga)

El paisaje kárstico que componen las rocas del Torcal de Antequera ya es de por sí un atractivo elemento al que, además, puede añadirse una lluvia de estrellas como complemento perfecto a una brillante velada en una de las zonas más destacadas de la geografía andaluza.

Hombre observa la lluvia de estrellas en El Torcal de Antequera (Málaga), en agosto de 2011.
Hombre observa la lluvia de estrellas en El Torcal de Antequera (Málaga), en agosto de 2011.

2. Playa de Camposoto (San Fernando, Cádiz)

A los pies del océano Atlántico, en plena costa gaditana, pueden contemplarse las estrellas sin necesidad de acudir a altos riscos o inaccesibles montañas. La oscura playa de Camposoto es un buen lugar para verlas al son que marcan las olas. Que no le traicione el subconsciente: conviene abrigarse.

3. Observatorio Astronómico de Forcarei (Forcarei, Pontevedra)

En lo alto de una colina, a 670 metros de altitud, se encuentra el Observatorio Astronómico de Forcarei, inaugurado en 2009, y de fácil acceso por la carretera hacia A Estrada desde Forcarei. En sus negros cielos, y sin necesidad de entrar en la instalación, se divisan estos fenómenos astronómicos.

4. Ribera del Guadiamar (El Castillo de las Guardas, Sevilla)

30 kilómetros al norte de Sevilla, en el municipio de El Castillo de las Guardas, se encuentra el corredor verde de la ribera del Guadiamar, un sitio habilitado en el que se pueden observar las estrellas en plena naturaleza. Una vez allí, unas mantas y a disfrutar.

5. La Pedriza (Manzanares el Real, Madrid)

La madrileña sierra de Guadarrama, en su vertiente sur, alberga La Pedriza, un gran batolito granítico cercano a la capital de España. Su bello paraje es cita obligada para numerosos senderistas, aunque menos conocida es su excelente ubicación para avistar el cielo.

6. Pantano de Santa Fe (Montseny, Barcelona)

Ubicado en el Parque Natural del Montseny, declarado reserva de la biosfera en 1978 por la UNESCO, el pantano de Santa Fe es uno de sus más bellos rincones en los que disfrutar de una lluvia de estrellas en un ambiente 100 % natural. Y a tan solo 45 minutos de Barcelona.

7. Sierra de Ujué (Ujué, Navarra)

La sierra de Ujué es un buen escaparate en el norte para cazar estrellas. Desde Ujué, un pequeño pueblo de escasos 200 habitantes y a 815 metros de altitud, que domina los Pirineos y las tierras de la Ribera de Navarra, puede partirse en busca de un rincón que le permita vislumbrarlas con detalle.

8. Ayora (Ayora, Valencia)

El interior de Valencia alberga este pueblo, de unos 5.000 habitantes, en cuyos barrios medievales, y especialmente en el castillo que los corona, se citan estrellas y espectadores para montar el espectáculo en un entorno único flanqueado por sierras.

9. Las Cañadas del Teide (Tenerife)

Un clásico. Las Cañadas del Teide, en pleno parque nacional al que da nombre el volcán, es uno de los mejores lugares para abstraerse observando el firmamento. Sus senderos cortos y accesibles y la elevada altitud a la que se encuentran (el Teide es el punto más alto de España), convierten a este lugar en una gran elección, aunque algo concurrido. Tiene certificado Starlight como cielo óptimo para la observación astronómica.

10. Gredos Norte (Ávila)

Catalogado como uno de los 25 lugares en todo el mundo con la denominación de “cielo oscuro” (obedece a unos requisitos contra la contaminación lumínica), el norte de la Sierra de Gredos representa un ecosistema ideal, con más de 86.000 hectáreas de naturaleza óptimas para la observación. Posee certificado Starlight.

Este artículo fue publicado originalmente en agosto de 2014.

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