Cartas al director

El acoso escolar

Cuando los compañeros de clase cargan contra uno de ellos, le insultan, le pegan, le humillan, le desprecian o no cuentan con él para nada, puede parecer —erróneamente— que esto es algo normal a ciertas edades. Que la inmadurez de la adolescencia nos lleva a cometer errores de los que años más tarde tendremos tiempo de arrepentirnos. Pero esto está lejos de la normalidad.

El acoso escolar es un mal de nuestro tiempo. Cada vez con más asiduidad noticias sobre adolescentes que padecen bullying aparecen ante nuestros ojos en televisiones y periódicos. Tenemos que dejar de llamar a este tip...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Cuando los compañeros de clase cargan contra uno de ellos, le insultan, le pegan, le humillan, le desprecian o no cuentan con él para nada, puede parecer —erróneamente— que esto es algo normal a ciertas edades. Que la inmadurez de la adolescencia nos lleva a cometer errores de los que años más tarde tendremos tiempo de arrepentirnos. Pero esto está lejos de la normalidad.

El acoso escolar es un mal de nuestro tiempo. Cada vez con más asiduidad noticias sobre adolescentes que padecen bullying aparecen ante nuestros ojos en televisiones y periódicos. Tenemos que dejar de llamar a este tipo de situaciones “chiquilladas” o “cosas de niños”. No lo son. Cuando un niño se muestra retraído, no quiere ir al colegio, no interactúa con sus compañeros, se inventa enfermedades para quedarse en cama en lugar de ir a clase… preocúpate, quizás algo está pasando. Actúa. Ningún niño se merece recordar su infancia con tristeza.— Jorge Melguizo.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En