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Txeroki se niega a contestar preguntas en su primer juicio en España

El exdirigente etarra, entregado temporalmente por Francia, se enfrenta a 15 años de cárcel por enviar un paquete bomba a un empresario

El que fuera jefe de ETA, Garikoitz Aspiazu, Txeroki, ha escenificado en su primera vista en España un juicio de ruptura. Está acusado del envío de un paquete bomba al presidente del Consejo de Administración del Grupo Correo Enrique Ybarra, una acusación por la que le piden 15 años de prisión. Txeroki se ha negado a ponerse de pie y a contestar a cualquier pregunta del fiscal o de su abogada. Lo único que ha dicho, en euskera, aunque no ha sido traducido, y dirigido al tribunal fue: "No reconozco vuestra legitimidad para juzgar a ciudadanos vascos. No voy a participar en esta farsa". Luego, ha presenciado el juicio desde la pecera de la sala antiterrorista de la Audiencia Nacional mirando por debajo de la cortinilla que protege a los testigos, para identificar a los policías que declaraban en esa condición. Él tiene derecho a mirar y a saber quién declara contra él, pero el modo en el que lo ha hecho es una forma de intimidación.

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Han comparecido como testigos los artificieros que desactivaron el paquete e incluso un colaborador de ETA que había alojado en su domicilio de Amorebieta (Vizcaya) a todos los integrantes del comando Olaia (denominado así en homenaje a la activista de ETA Olaia Castresana, muerta al estallarle una bomba que intentaba manipular). El colaborador ha dicho al tribunal que solo conocía a Txeroki de la tele aunque inmediatamente antes le había saludado.

Las pruebas indican que los tres miembros del comando Olaia (Txeroki, Asier Arzalluz e Idoia Mendizabal) estuvieron alojados en ese domicilio entre septiembre de 2001 y mayo de 2002 mientras realizaron seis acciones terroristas, incluido el envío de de tres paquetes bomba. Así se deduce de un documento incautado al que entonces era jefe de ETA, Juan Antonio Olarra Guridi, que describe los comandos que dependen de él y los atentados que perpetran. Entre las pruebas descritas en el juicio figura la máquina de escribir con la que se confeccionó la dirección del destinatario del paquete bomba y también existen pruebas de ADN que sitúan al comando en el piso en cuestión. Sin embargo, no se ha aportado ninguna prueba de que Aspiazu enviara o manipulara personalmente el sobre o el explosivo.

Mendizabal y Arzalluz ya fueron condenados a 15 años de cárcel en octubre del año pasado por los hechos por los que se juzga a Txeroki

El sanguinario exdirigente etarra ha manifestado recientemente que "la lucha armada no procede", y que "ahora toca cambiar de estrategia", pues ETA tiene que "ceder la lucha armada a favor de la lucha política", según algunos comentarios recientes realizados desde la prisión de Navalcarnero (Madrid) a los que tuvo acceso EL PAÍS.

Txeroki representaba la línea más dura de ETA hasta su detención el 7 de noviembre de 2008 en Cauterets (Francia). Fue entregado temporalmente por Francia el 30 de mayo para ser juzgado en este caso. Ya fue entregado en septiembre de 2009, también de manera temporal, para ser interrogado en relación a cinco de las 21 causas que tiene abiertas en la Audiencia Nacional, entre ellas, el atentado de la T-4 de Barajas el 30 de diciembre de 2006.

El exdirigente etarra Garikoitz Aspiazu, <i>Txeroki,</i> durante la primera sesión del proceso por enviar un paquete bomba.
El exdirigente etarra Garikoitz Aspiazu, Txeroki, durante la primera sesión del proceso por enviar un paquete bomba.M.H.de LEÓN (EFE)

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