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3.500 Millones
Coordinado por Gonzalo Fanjul y Patricia Páez
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Presupuestos participativos: democracia real al alcance de la mano

Foto de Nathalie Paco

Nunca me he alegrado tanto de ser el peor profeta del mundo como el 15 de mayo pasado y los días que le siguieron. En mi primera entrada en este blog me preguntaba por los motivos de que los jóvenes españoles no se indignaran. Ojo de lince, me llaman.

Algunos vaticinan que el movimiento morirá por falta de concreción, de liderazgo, de estrategia… Pero no se fíen. El Movimiento 15-M ha nacido casado con la reivindicación, y su exigencia se resume en que se escuche la voz de la ciudadanía. Se me ocurre que, como el movimiento se demuestra andando, quizá sea el momento de empezar a actuar, como si nuestros políticos ya nos escucharan, aunque no lo hagan. No hay que esperar a que nos den permiso; se trata justo de lo contrario.

Y, en concreto, ¿qué se puede hacer? Mucho, me parece. Se puede generar transparencia, no solo exigirla, estudiando, publicando y debatiendo los gastos de las administraciones públicas. Se puede promover la consulta popular, no solo reivindicarla, como hace años hizo, con éxito notable, la Red Ciudadana por la Abolición de la Deuda Externa.

También se pueden proponer, debatir, votar y aprobar ideas concretas para mejorar el entorno más cercano, como en el caso de lospresupuestos participativos.Este modelo de democracia directa nació en Porto Alegre, Brasil, en 1989. En esencia consiste en abrir la decisión sobre las prioridades y la distribución del gasto municipal a la ciudadanía.Según elmanual delForo Ciudades para la Vida de Perúlos principios clave de un Presupuesto Participativo son:

-unas reglas de juego claras,

-representación del conjunto de intereses de los ciudadanos, que han de poder acceder a la información relevante, incluyendo las cuentas reales),

-neutralidad de las autoridades y compromiso de cumplimiento,

-control social y rendición de cuentas…

En resumen, democracia real.

La idea original de Porto Alegre era ceder la palabra a la ciudadanía, esencialmente a la más desfavorecida, para establecer las prioridades reales de la población, dada la escasez de recursos y el número casi infinito de necesidades. Este modelo, nacido en el Sur, no solo ha sido replicado en Latinoamérica: ¡el Estado de Minnesota y la ciudad de Yokohama –entre otros– también se han apuntado! En España la idea ha triunfado principalmente en Cataluña, en Valencia y en Andalucía, aunque también en otros lugares. Sin embargo, no siempre se ha abierto espacio suficiente a la participación real y en muchos casos la experiencia es perfectible todavía.

El Movimiento 15-M ha empezado a descentralizar su trabajo en asambleas locales. ¿Por qué no echar a andar, actuar como si ya se hubiera logrado y conformar espacios de decisión sobre las auténticas prioridades de los ciudadanos? ¿Por qué no debatir si es prioritario arreglar un bache antes que remodelar por quinta vez una plaza? ¿No sería todo un ejercicio de ciudadanía establecer entre todos si preferimos darle prioridad a un centro social o a la iluminación de las fiestas patronales? ¿No es, finalmente, nuestro dinero?

Sí que lo es. Como han evidenciado los jóvenes y no tan jóvenes indignados, los políticos son los administradores a los que hemos contratado con nuestro voto; son nuestros empleados y nosotros somos el Consejo de Administración. La democracia es nuestra. Es verdad que algo ha pasado en el camino y las cosas parecen estar patas arriba. Mientras las volteamos a su posición original, empecemos a trabajar.

Comentarios

ya, tiene gracia, en Elche y otras ciudades gobernadas por alcaldes en su mayoria socialistas y de otras siglas de izquierda ya se habia promovido en la anterior legislatura unos presupuestos participativos en donde comisiones de los diferentes barrios debatian sus propuestas y presentaban sus ideas, siendo muchas de estas aprobadas por el ayuntamiento.El movimiento del 15-M pocos dias antes de las elecciones por lo pronto lo unico que consiguio fue derribar estos pocos reductos progresistas que ahora pasan a manos del PP y esto es cuanto menos un paso atras...Motivos para la indignacion los hay a miles, pero no fue ni el momento ni el lugar ni los modos, no ante unas elecciones municipales donde los alcaldes son personas que poco tienen que ver con sus siglas
Sí, en Sevilla también el PSOE promovió los presupuestos participativos. No participó prácticamente nadie que no fuera del partido. ¿Qué viene el PP? ¡Uy qué miedo! Si ya tenemos políticas neoliberales instaladas: el PP va a continuar con las politicas de mercado, nada más. ¡De hecho ellos mismo dicen que hay que continuar con las políticas de ajuste del PSOE!Por cierto, el PSOE, el de los "presupuestos participativos" construyó un monumento a la megalomanía en la Plaza de la Encarnación, gastándose más de 100 millones de euros (no se sabe en realidad cuánto ha costado). Un monumento que no le gusta a casi nadie y cuyo presupuesto es desmesurado a todas luces, más en el momento de crisis que tenemos. La parte positiva es que hoy es un símbolo del despertar de la conciencia ciudadana. Y la plaza se ha rebautizado a Plaza del 15 de Mayo.¡Animo! Seguimos en la lucha por una Democracia Real Ya
Pero quien habla de partidos políticos aquí? Los dos miserables que escriben dos comentarios que son de la ruinosa sección de política de este periódico. Este articulo va de alternativas reales a un sistema que no funciona, precisamente porque el enfoque político es erroneo y se ha desvirtuado completamente. Que os vaya bien con vuestros partidos, nosotros los partidos jugamos en la calle y en directo.
Una explicación horrible de lo que son los presupuestos participativos, y unos planteamiento faltos del mínimo rigor. La expresión: "los políticos son los administradores a los que hemos contratado con nuestro voto; son nuestros empleados y nosotros somos el Consejo de Administración" es horrible. No hay nada menos democrático que "emplear" a otra persona "(los que saben hablan de una relación asimétrica con una parte fuerte -empresario- y otra débil -trabajador o contratado-) ni organismos más oscurantistas y cerrados que los "consejos de administración" (que se autoasignan dietas y compensaciones enormes por reunirse a buscar cómo pagar menos a los que realmente trabajan en la empresa). Mezclar todo esto y los presupuestos participativos no tiene sentido: democracia y relaciones de poder de empresa no son comparables, ni aceptable que se hable de que todos seamos iguales queriéndonos poner en el lado del que oprime.
ya, tiene gracia, en Elche y otras ciudades gobernadas por alcaldes en su mayoria socialistas y de otras siglas de izquierda ya se habia promovido en la anterior legislatura unos presupuestos participativos en donde comisiones de los diferentes barrios debatian sus propuestas y presentaban sus ideas, siendo muchas de estas aprobadas por el ayuntamiento.El movimiento del 15-M pocos dias antes de las elecciones por lo pronto lo unico que consiguio fue derribar estos pocos reductos progresistas que ahora pasan a manos del PP y esto es cuanto menos un paso atras...Motivos para la indignacion los hay a miles, pero no fue ni el momento ni el lugar ni los modos, no ante unas elecciones municipales donde los alcaldes son personas que poco tienen que ver con sus siglas
Sí, en Sevilla también el PSOE promovió los presupuestos participativos. No participó prácticamente nadie que no fuera del partido. ¿Qué viene el PP? ¡Uy qué miedo! Si ya tenemos políticas neoliberales instaladas: el PP va a continuar con las politicas de mercado, nada más. ¡De hecho ellos mismo dicen que hay que continuar con las políticas de ajuste del PSOE!Por cierto, el PSOE, el de los "presupuestos participativos" construyó un monumento a la megalomanía en la Plaza de la Encarnación, gastándose más de 100 millones de euros (no se sabe en realidad cuánto ha costado). Un monumento que no le gusta a casi nadie y cuyo presupuesto es desmesurado a todas luces, más en el momento de crisis que tenemos. La parte positiva es que hoy es un símbolo del despertar de la conciencia ciudadana. Y la plaza se ha rebautizado a Plaza del 15 de Mayo.¡Animo! Seguimos en la lucha por una Democracia Real Ya
Pero quien habla de partidos políticos aquí? Los dos miserables que escriben dos comentarios que son de la ruinosa sección de política de este periódico. Este articulo va de alternativas reales a un sistema que no funciona, precisamente porque el enfoque político es erroneo y se ha desvirtuado completamente. Que os vaya bien con vuestros partidos, nosotros los partidos jugamos en la calle y en directo.
Una explicación horrible de lo que son los presupuestos participativos, y unos planteamiento faltos del mínimo rigor. La expresión: "los políticos son los administradores a los que hemos contratado con nuestro voto; son nuestros empleados y nosotros somos el Consejo de Administración" es horrible. No hay nada menos democrático que "emplear" a otra persona "(los que saben hablan de una relación asimétrica con una parte fuerte -empresario- y otra débil -trabajador o contratado-) ni organismos más oscurantistas y cerrados que los "consejos de administración" (que se autoasignan dietas y compensaciones enormes por reunirse a buscar cómo pagar menos a los que realmente trabajan en la empresa). Mezclar todo esto y los presupuestos participativos no tiene sentido: democracia y relaciones de poder de empresa no son comparables, ni aceptable que se hable de que todos seamos iguales queriéndonos poner en el lado del que oprime.
ya, tiene gracia, en Elche y otras ciudades gobernadas por alcaldes en su mayoria socialistas y de otras siglas de izquierda ya se habia promovido en la anterior legislatura unos presupuestos participativos en donde comisiones de los diferentes barrios debatian sus propuestas y presentaban sus ideas, siendo muchas de estas aprobadas por el ayuntamiento.El movimiento del 15-M pocos dias antes de las elecciones por lo pronto lo unico que consiguio fue derribar estos pocos reductos progresistas que ahora pasan a manos del PP y esto es cuanto menos un paso atras...Motivos para la indignacion los hay a miles, pero no fue ni el momento ni el lugar ni los modos, no ante unas elecciones municipales donde los alcaldes son personas que poco tienen que ver con sus siglas
Sí, en Sevilla también el PSOE promovió los presupuestos participativos. No participó prácticamente nadie que no fuera del partido. ¿Qué viene el PP? ¡Uy qué miedo! Si ya tenemos políticas neoliberales instaladas: el PP va a continuar con las politicas de mercado, nada más. ¡De hecho ellos mismo dicen que hay que continuar con las políticas de ajuste del PSOE!Por cierto, el PSOE, el de los "presupuestos participativos" construyó un monumento a la megalomanía en la Plaza de la Encarnación, gastándose más de 100 millones de euros (no se sabe en realidad cuánto ha costado). Un monumento que no le gusta a casi nadie y cuyo presupuesto es desmesurado a todas luces, más en el momento de crisis que tenemos. La parte positiva es que hoy es un símbolo del despertar de la conciencia ciudadana. Y la plaza se ha rebautizado a Plaza del 15 de Mayo.¡Animo! Seguimos en la lucha por una Democracia Real Ya
Pero quien habla de partidos políticos aquí? Los dos miserables que escriben dos comentarios que son de la ruinosa sección de política de este periódico. Este articulo va de alternativas reales a un sistema que no funciona, precisamente porque el enfoque político es erroneo y se ha desvirtuado completamente. Que os vaya bien con vuestros partidos, nosotros los partidos jugamos en la calle y en directo.
Una explicación horrible de lo que son los presupuestos participativos, y unos planteamiento faltos del mínimo rigor. La expresión: "los políticos son los administradores a los que hemos contratado con nuestro voto; son nuestros empleados y nosotros somos el Consejo de Administración" es horrible. No hay nada menos democrático que "emplear" a otra persona "(los que saben hablan de una relación asimétrica con una parte fuerte -empresario- y otra débil -trabajador o contratado-) ni organismos más oscurantistas y cerrados que los "consejos de administración" (que se autoasignan dietas y compensaciones enormes por reunirse a buscar cómo pagar menos a los que realmente trabajan en la empresa). Mezclar todo esto y los presupuestos participativos no tiene sentido: democracia y relaciones de poder de empresa no son comparables, ni aceptable que se hable de que todos seamos iguales queriéndonos poner en el lado del que oprime.

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