El último avión con soldados españoles procedentes de Irak llegará el lunes a Madrid
Entre mañana y el lunes se completará el regreso, aunque en Kuwait se quedará un pequeño grupo para embarcar el material logístico
Los últimos soldados españoles que quedaban en Diwaniya, unos 450, dejaron ayer por la tarde Irak en un convoy de 110 vehículos que les trasladó a Kuwait. Anoche, más de 800 efectivos españoles pernoctaron en Camp Virginia, una base estadounidense. Desde allí, está previsto que partan mañana y el lunes en tres vuelos chárter de la compañía Air Europa con destino al aeropuerto de Almería y a Torrejón de Ardoz, según han informado fuentes del Ministerio de Defensa
El primer avión aterrizará en Almería a partir de la 4.00 de la madrugada del domingo. En el aparato viajarán 200 legionarios. Ya por la tarde, llegará otro aparato con militares al mismo aeropuerto. El último avión llegará el lunes por la tarde a la base de Torrejón de Ardoz. Por el momento, ya han vuelto a España 370 soldados.
Organizando el regreso de los últimos soldados, se encuentran en Kuwait el jefe del Contingente de Apoyo al Repliegue Español (Conapre), el general de brigada José Muñoz, y el también general Enrique de Ayala.
No obstante, aún permanecerá en Kuwait un pequeño contingente de entre cincuenta y 100 efectivos de apoyo logístico. Estos militares serán los encargados de transportar el material desde Camp Virginia, donde se ha acumulado, hasta el puerto kuwaití, según ha explicado el portavoz militar español en Kuwait, el teniente coronel José Luis Puig. Hace cuatro días, un buque mercante zarpó con parte del material pesado (el más ligero se transportará en avión) y está previsto que otros dos zarpen con el resto el 8 y el 20 de junio.
Se trata de cuatro helicópteros, 91 vehículos de combate, 297 de transporte y de tipo logístico, y más de 300 contenedores, además de armamento, maquinaria, grupos electrógenos y otros pertrechos.
Un repliegue completado con éxito
En cuanto a la manera en que se ha completado el repliegue, el general Puig ha expresado su orgullo: "Todo el mundo está satisfecho, habida cuenta de que era una misión complicada y que el día anterior al repliegue total hubo una emboscada", en la que resultó herido leve un sargento primero, ha recordado el general español
Sobre el adelanto de la salida de Irak en una semana, Puig ha admitido que incluso la fecha límite del 27 de mayo era "un reto importante", pero el repliegue se aceleró en cuanto se transfirió la responsabilidad de la ciudad de Diwaniya y de su provincia al Ejército estadounidense, el pasado 16 de mayo. Hasta ese momento, las tropas españolas debían mantener las misiones habituales de control y seguridad en ese territorio, además de proseguir con el repliegue. "Los norteamericanos -ha apostillado Puig-han colaborado con nosotros de una forma excepcional" y el relevo se hizo con "diligencia".
