_
_
_
_
_
RELACIONES BILATERALES

Concluye sin avances la reunión entre Piqué y el ministro de Exteriores de Marruecos

Ambos países se encuentran enfrentados por cuestiones como la pesca o la inmigración

La reunión que hoy han mantenido los ministros de Exteriores de España y Marruecos no ha servido para que ambos países acerquen posiciones en el conflicto diplomático que les enfrenta y que ya ha supuesto la llamada a consultas del embajador marroquí en Madrid de forma indefinida. Josep Piqué y Mohamed Benaissa se han reunido hoy en Nueva York, pero tras el encuentro, el ministro español ha reconocido que no se ha logrado el clima que pueda hacer prever una pronta normalización de las relaciones bilaterales.

El ministro Piqué ha afirmado hoy que no puede expresarse optimista ni pesimista sobre la posibilidad de una pronta normalización de las relaciones bilaterales, aunque todo lo que sea hablar es "una mejora".

En rueda de prensa en Nueva York, Piqué ha explicado que en la reunión ha mostrado la "predisposición total y absoluta" de España a hablar de todos los problemas que desee plantear Marruecos, "sin ningún tipo de restricción", y ha subrayado que eso "debería permitir la normalización de la relación lo antes posible".

"La disposición de España es exactamente la misma que el primer día y no la vamos a cambiar; espero que a partir de todos encuentros y de la reiteración de los mismos mensajes pueda salir al final la solución que todos queremos", ha añadido el ministro, antes de indicar que Benaissa y él han acordado "seguir en contacto".

Las relaciones entre ambos países se han ido deteriorando desde la negativa de Marruecos a renovar el acuerdo pesquero con la Unión Europea. Este conflicto es más grave para España que para otros países de la UE, ya que la inmensa mayoría de los pescadores que faenan en los caladeros marroquíes son españoles.

Además, existen otros conflictos que enturbian las relaciones a ambos lados del estrecho, como el de la inmigración. En este sentido, España acusa a Marruecos de no ejercer suficiente control en la frontera, por lo que aumentan los problemas para las autoridades del sur peninsular, que tienen que hacer frente a las oleadas de inmigrantes ilegales que alcanzan la costa en pateras.

Estos conflictos culminaron el mes pasado con la llamada a consultas del embajador marroquí en Madrid, fecha desde la cual las relaciones se encuentran embarrancadas. Días después, el rey Mohamed VI se negó a que los periodistas españoles cubriesen su histórica visita a la ex colonia española del Sáhara. La entrevista no ha permitido desbloquear la vuelta a España del embajador marroquí y tampoco la convocatoria de la aplazada reunión bilateral de alto nivel, si bien Piqué ha precisado que este punto no figuraba en la agenda prevista para su conversación de hoy con Benaissa.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_