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La ciudad de Anaheim aprueba la mayor expansión de Disneyland en casi 30 años

El Concejo vota de forma unánime un proyecto de inversión de 1.900 millones de dólares para la próxima década

El castillo de Disney en el parque de Anaheim, que abrió sus puertas en 1955.
El castillo de Disney en el parque de Anaheim, que abrió sus puertas en 1955.Jae C. Hong (AP)
Luis Pablo Beauregard

Disney tiene al fin luz verde para expandir su reino. El Concejo de la ciudad de Anaheim ha aprobado la mayor expansión de Disneyland en casi 30 años. El proyecto, llamado DisneylandForward, crea una inversión de 1.900 millones de dólares a lo largo de la próxima década en el parque, que recibe anualmente unos 25 millones de visitantes. Este ha sido un triunfo para la compañía, quien llevaba tres años en una campaña para conquistar a los vecinos y los políticos locales. Los concejales votaron a favor de la propuesta 7-0.

El proyecto aprobado permite a Disney crecer sin necesidad que el parque se extienda a otros terrenos en una zona densamente poblada. En cambio, la compañía puede reorganizar su oferta, lo que incluye añadir algunas atracciones, dentro de las casi 200 hectáreas que ocupa en la ciudad, ubicada 48 kilómetros al sureste de Los Ángeles. “El proyecto no aumentaría el número de metros cuadrados de desarrollo ni los cuartos de hotel que actualmente se permiten”, asegura el informe analizado por los regidores.

Como es costumbre para la empresa, Disney guarda sus planes bajo un celoso secreto. En su campaña de convencimiento, la empresa no detalla para qué utilizará el espacio que ha visto modificado su permiso de uso de suelo. Este ha cambiado para seis propiedades que hoy son utilizadas como oficinas y aparcamientos para los empleados de los dos parques que tiene la empresa, Disneyland, inaugurado en 1955, California Adventure, que abrió sus puertas en 2001.

Sin embargo, la empresa revela en sus planes un “posible parque de atracciones inmersivo” que incluirá hoteles, tiendas y restaurantes. En otra ubicación, cruzando la avenida Katella, Disney también bosqueja un “nuevo tipo de entretenimiento”.

Disney utiliza ejemplos recientes de atracciones añadidas a sus parques internacionales para ilustrar cómo podrían verse las nuevas ofertas. Entre estos está Arendelle, la tierra de Elsa y Anna, las protagonizas de Frozen, un sitio que fue inaugurado en el otoño del año pasado en Hong Kong. O el de Zootopia, que recrea una metrópolis de mamíferos como la de la película animada en el parque de Shanghái. También se cita la tierra de Toy Story que hay en Florida, donde los juguetes de la popular saga de películas de Pixar son más grandes que los humanos para dar la impresión de que se es parte de este mundo infantil.

La multinacional cumplió cien años en octubre. El año pasado, sus ejecutivos anunciaron un plan de inversión de 60.000 millones de dólares a lo largo de diez años. Esta servirá para “turbocargar” y expandir los seis parques del grupo en América, Europa y Asia con zonas inspiradas en éxitos recientes. El 30% de la inversión se hará en Florida, un bastión donde la empresa ha visto crecer su competencia velozmente. Los estudios Universal planean abrir un nuevo parque en 2025, algo que amenaza el margen del 8% de ganancias operativas que Disney tiene en esta filial, uno de sus negocios más sólidos desde 2017.

Comandada por Bob Iger, el consejero delegado, la compañía ha apostado por los parques como su método más confiable de ingresos y ante los turbulentos tiempos por los que pasa la industria audiovisual. Disney basó su estrategia en los números récord de venta de merchandising que se han registrado en 2022 y 2023, año en el que la asistencia se recuperó para colocarse en los niveles prepandémicos. La empresa anunció el otoño pasado un incremento en el precio de las entradas a sus parques para compensar la caída del negocio televisivo.

El voto definitivo de la propuesta llegará en una nueva segunda votación en el Concejo el mes de mayo. Sin embargo, DisneyForwrd ya ha avanzado sobre dos obstáculos. El primero fue la votación dentro de la comisión de Planeación Urbana, donde recibió un respaldo de 5-1. El segundo llegó en el pleno del Consistorio, celebrado este miércoles y al que acudieron varios vecinos de la zona. La propuesta no encontró resistencia alguna y fue avalada de forma unánime. Se prevé que suceda lo mismo en el encuentro del mes próximo.

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Sobre la firma

Luis Pablo Beauregard
Es uno de los corresponsales de EL PAÍS en EE UU, donde cubre migración, cambio climático, cultura y política. Antes se desempeñó como redactor jefe del diario en la redacción de Ciudad de México, de donde es originario. Estudió Comunicación en la Universidad Iberoamericana y el Máster de Periodismo de EL PAÍS. Vive en Los Ángeles, California.
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