_
_
_
_
_

El abogado de la UE da la razón a Airbnb y rechaza que ejerza de agente inmobiliario

El letrado afirma que la plataforma se limita a poner en contacto a arrendatarios y arrendadores

Álvaro Sánchez
La sede central de Airbnb en California.
La sede central de Airbnb en California. Gabrielle Lurie (REUTERS)
Más información
AirBnB se defiende en los tribunales
Las grandes capitales de Europa y EE UU también plantan cara a Airbnb
Competencia trata de tumbar las normas contra Airbnb de Madrid, Bilbao y San Sebastián

La irrupción de aplicaciones enfocadas al transporte de pasajeros —como Uber— o al alojamiento turístico —caso de Airbnb— ha generado virulentas reacciones de taxistas y hosteleros por considerar que pese a operar en el mismo mercado, disfrutan de reglas de juego privilegiadas. Y la discusión suele terminar en los tribunales. Hace año y medio, la justicia europea falló contra Uber al estimar que se trata de un servicio de transporte que debe disponer de licencia y no una mera plataforma digital. Tras la denuncia de una organización hostelera francesa, este martes ha llegado una primera opinión preliminar sobre Airbnb, y al contrario de lo que sucedió con Uber, el abogado general ha estimado que ofrece un servicio de la sociedad de la información y por tanto no ejerce como agente inmobiliario.

La decisión es solo una recomendación, dado que la última palabra la tiene el Tribunal de Justicia de la UE, que suele seguir sus consejos. De hacerlo esta vez, supondría un varapalo para el sector hostelero, que busca limitar la acción de un competidor al que acusan de desleal. El abogado polaco Maciej Szpunar discrepa, para él, Airbnb es solo un intermediario, por lo que no puede estar sujeto a las mismas restricciones que los agentes inmobiliarios. "Es un servicio consistente en poner en relación, a través de una plataforma electrónica, a potenciales arrendatarios con arrendadores que ofrecen prestaciones de alojamiento de corta duración", ha determinado este martes.

La consulta llegó desde un tribunal de primera instancia de París. La capital francesa es el mayor mercado de Airbnb, con unas 65.000 viviendas disponibles. La aplicación tiene su sede europea en Irlanda, y ha rebatido la denuncia de la asociación turística francesa Ahtop rechazando que pueda ser tratada como una agencia inmobiliaria para refugiarse así en la directiva de comercio electrónico, que le permitiría continuar con su actividad sin cambios.

El abogado general también ha recordado que si Francia deseaba aplicar restricciones que restrinjan servicios de la sociedad de la información, debía haberlo notificado antes a la Comisión Europea y al Estado miembro de origen —en este caso Irlanda— para que tomara medidas, y nada indica que así lo haya hecho.

A la espera de que en unos meses se pronuncie el TJUE, la compañía estadounidense ha festejado la postura del abogado general. "Airbnb quiere ser un buen socio para las Administraciones y ha colaborado con más de 500 gobiernos de todo el mundo para ayudar a los anfitriones a compartir sus viviendas, cumpliendo las normas y pagando los impuestos que debe".

La Comisión Europea ya advirtió, tras la sentencia de Uber, que el fallo no era extrapolable a plataformas como Deliveroo y Airbnb, y que habría que estudiar caso por caso

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Álvaro Sánchez
Redactor de Economía. Ha sido corresponsal de EL PAÍS en Bruselas y colaborador de la Cadena SER en la capital comunitaria. Antes pasó por el diario mexicano El Mundo y medios locales como el Diario de Cádiz. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla y Máster de periodismo de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_