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El paro en Cataluña registra su mayor subida en un noviembre desde 2009

La afiliación bajó el mes pasado y el desempleo aumentó en toda España

Manuel V. Gómez

Las dos caras del mercado laboral, el empleo y el paro, tuvieron un mal comportamiento en noviembre. El primero cayó y el segundo subió. Lo normal para el mes pasado: la hostelería pierde fuelle y no hay otro sector que en temporada alta que compense. El paro subió en 7.255 personas, hasta los 3,47 millones, y la Seguridad Social perdió 12.733 afiliados. Retrocesos que frenaron una tendencia de fondo claramente positiva, que hace que los cotizantes con empleo hayan subido un 3,6% en los últimos 12 meses, según el Ministerio de Empleo. Los datos podrían mejorar de no ser porque noviembre acumula más indicios de que la crisis política catalana ha enfriado algo su buena marcha económica: el paro registrado subió en 7.391 personas, el peor dato desde 2009.

La salida de sedes sociales de empresas de Cataluña se ha frenado. El goteo continúa, pero a menor ritmo. Otras señales apuntan a que el procés se está cobrando su factura económica: las reservas hoteleras menguan y el comercio minorista vende menos. Y esto acaba por llegar al mercado laboral. En noviembre la Seguridad Social perdió 4.038 afiliados, un dato que empeora sensiblemente lo sucedido el año anterior, cuando ganó 312. Es la peor cifra desde 2013, entonces la economía empezaba a salir lentamente de la recesión. Ahora crece a velocidad de crucero por encima del 3% anual.

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Pero si hay un dato que muestra que las cosas se han deteriorado es el paro registrado. El mes pasado las oficinas de empleo catalanas contaron 7.391. Es el peor noviembre desde 2009. También Baleares tuvo un comportamiento muy negativo. No obstante, si se compara lo sucedido este año con la media registrada desde 2008, se aprecia que el aumento del desempleo en Cataluña supera en un 48% ese promedio. En cambio, en la otra comunidad, donde el final del verano y la temporada turística convierten en habitual una muy pronunciada subida del paro al llegar el otoño (12.500 parados más el mes pasado), el incremento empeoró en un 25% lo sucedido en los últimos nueve años.

Este enfriamiento no se ha trasladado al resto de España, donde el mercado laboral ha seguido mejorando a un ritmo alto. Los datos mensuales han sido negativos, cierto, pero menos que el año pasado. Y, además, cuando se observa los números limpios de los efectos de la estacionalidad ambas cifras se convierten en positivas.

También se aprecia esto en los números anuales, especialmente en los da la Seguridad Social. El incremento de la afiliación sube a un ritmo anual del 3,6%, más de 637.000 cotizantes adicionales de media en los últimos 12 meses. Esta velocidad, o algo por encima del 3%, ya se mantiene desde hace más de un año. Desde que comenzó la recuperación, el instituto previsor ha recuperado ya 2,3 millones de afiliados. Sin embargo, todavía faltan 1,2 millones de empleos más para llegar al nivel previo a la crisis.

Esa es la parte que “aún queda por hacer”, en palabras del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que al divulgarse los datos subrayó que se “está avanzando en la buena dirección”.

Otro rasgo que se repite es la buena marcha del régimen general, con el que cotizan a la Seguridad Social los asalariados. Su crecimiento supera holgadamente el del conjunto del sistema. En el último año, el incremento es del 4,7%. La cifra absoluta, 625.956 afiliados más en este régimen, casi iguala a la de todo el instituto previsor, en el que también se agregan los autónomos y los regímenes especiales (mar, carbón, hogar o agrario).

Pese a este incremento del régimen general, el volumen total de empleo de menor calidad continúa creciendo y ganando peso en el conjunto del mercado laboral. Según los datos de la Seguridad Social, los afiliados que tenían un contrato temporal y/o a tiempo parcial suponen un 41,3%. Este porcentaje crece lentamente pero sin freno, en el mismo mes del año pasado se situó en el 40%.

Este es el flanco sobre el que dispararon los sindicatos. Tanto UGT como CC OO subrayaron la fuerza de la precariedad. Por su parte, la patronal CEOE apuntó que los datos de este lunes “reflejan una tendencia favorable a la recuperación del empleo”.

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Sobre la firma

Manuel V. Gómez
Es corresponsal en Bruselas. Ha desarrollado casi toda su carrera en la sección de Economía de EL PAÍS, donde se ha encargado entre 2008 y 2021 de seguir el mercado laboral español, el sistema de pensiones y el diálogo social. Licenciado en Historia por la Universitat de València, en 2006 cursó el master de periodismo UAM/EL PAÍS.

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