Bruselas incluye seis infraestructuras españolas en su lista de proyectos prioritarios
Se beneficiarán de las inversiones previstas en llamada "iniciativa de crecimiento"
Seis infraestructuras que afectan directamente a España han sido incluidas por la Comisión Europea en la lista de proyectos prioritarios y se beneficiarán de las inversiones previstas en la llamda "iniciativa de crecimiento". Se trata de las líneas ferroviarias de alta velocidad Lisboa-Madrid, Oporto-Vigo y Figueras-Perpiñán, así como de las conexiones de energía con Francia y Portugal y de gas con Argelia.
La inversión global para estos proyectos será de 10.000 millones por año hasta 2010
El presidente de la Comisión, Romano Prodi, acompañado de la vicepresidenta Loyola de Palacio y del comisario de Investigación, Philippe Busquin, ha presentado a la prensa la propuesta final sobre la citada iniciativa, que será elevada a los jefes de estado o gobierno para que tomen una decisión en diciembre.
Del centenar largo de proyectos propuesto inicialmente la Comisión ha seleccionado, como se comprometió a hacer en octubre sólo una lista reducida de 56 grandes obras en condiciones de empezar inmediatamente. Sin embargo, Prodi ha advertido de que la lista "es abierta" y se irán incorporando otros proyectos a medida que reúnan las condiciones para su financiación.
40% de inversión privada
La inversión global prevista para lanzar estos proyectos prioritarios es de 63.000 millones de euros, unos 10.000 millones cada año hasta 2010. De ellos 17.000 corresponden a los proyectos que afectan directamente a España. La Comisión calcula que un 60% del capital procederá de fondos públicos y el 40% restante de inversiones privadas.
Por sectores las infraestructuras en transportes recibirán la mayor parte, con 38.000 millones de euros hasta 2010, seguida de la de Telecomunicaiones, investigación, desarrollo e innovación, con 14.000 millones, y, en tercer lugar, la energía, con 10.000 millones.
Con este impulso a la inversión en infraestructuras la Comisión Europea trata además de dar un empujón a la economía comunitaria, que se encuentra estancada en los dos últimos trimestres como consecuencia de la crisis económica internacional, sin que se atisben signos de recuperación inminentes, como ayer mismo reconoció el comisario de Economía, Pedro Solbes.
