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Entrevista:JAVIER ZANETTI | 138 veces internacional con Argentina

"El orgullo no se vende"

Messi tenía cinco años el día que Javier Zanetti (Dock Sud, Avellaneda; 37 años) debutó con Argentina en Santa Fe, donde esta noche jugará por 139ª vez en el que podría ser su último partido con la selección. Salió de Talleres, jugó en Banfield y a los 22 años se fue a Milán. Ahí sigue. Diecisiete años de carrera en el Inter dan para mucho: es el futbolista extranjero que más minutos lleva en el calcio y tiene el récord de partidos con el brazalete neroazzurro, por algo le llaman Il Capitano. Tiene una fundación dedicada a ayudar a niños necesitados de una villa de Buenos Aires. Le llaman El Tractor en los campos y Pupi fuera, desde que era un crío.

Pregunta. ¿Qué es la fundación Pupi?

"Messi es muy inteligente, sabe lo que le valoramos. Hemos de disfrutarlo"
"No hay tiempo para hacer las cosas, todo es inmediato... No es fácil ser seleccionador"

Respuesta. Es la fundación Por un Piberío Integrado. La montamos hace 10 años en uno de los peores momentos de la sociedad argentina. Con Paula, mi señora, y unos amigos vimos la necesidad de ayudar. Ahora apoyamos a mas de mil personas entre chicos y familias de una parte de Buenos Aires muy dañada, cerca de Lanús. Les llevamos al colegio por la mañana, los vamos a buscar, los llevamos a la sede, les damos de almorzar y a la tarde realizan todas las tareas complementarias hasta que meriendan y los llevamos a sus casas. Es educación, cultura, proyectos de salud, darles alternativas que por su infancia no tienen la oportunidad... Mi padre era albañil y vi su sacrificio y el de mi mamá para que mi hermano y yo pudiéramos estudiar. Eso me marcó. Es fundamental el acceso a la cultura y en ese sentido mis hijos son unos privilegiados. Por eso siento la necesidad de darles una oportunidad a otros niños que no la tienen.

P. Cuando usted tenía seis años, como ahora su hija Sol, ¿se imaginaba que seguiría jugando a fútbol en pantalón corto a los 37, por ejemplo?

R. No. A esa edad solo soñaba con jugar en Primera División y jugar un partido con Argentina. Lo demás me ha superado.

P. Sus números son espectaculares. ¿Cómo se llega a jugar tanto? ¿Es una cuestión física o mental?

R. Gracias a Dios mis papás me dieron esta genética. Es evidente. Pero la cabeza es tan importante o más, porque es la que te exige respetar la cultura del trabajo, trabajar cada entrenamiento con la misma conducta.

P. ¿Qué se llevará del fútbol?

R. Las personas, los lugares que conocí, y con el deporte, con la esencia de haber practicado deporte. Los títulos quedan en un segundo plano al hablar de toda una vida, son 37 años. Si me pregunta por un partido, puedo decirle que es inolvidable la final de Champions en el Bernabéu o el día que perdimos una Liga con el Juventus... Claro, hay momentos. Pero del fútbol me llevaré gente, lugares, afectos y las enseñanzas de la práctica del deporte.

P. ¿Es capaz de hacer la lista de entrenadores que ha tenido?

R. No me caben en una hoja, pero de todos siempre aprendes algo. En el Inter hubo épocas que cambiaron muchos entrenadores. Los éxitos se dieron al encontrar una continuidad. En Argentina también he tenido muchos. Ninguno me enseñó tanto como Bielsa. Fueron seis años y me marcó como jugador y persona. Pero he tenido a Cúper, Mourinho... José es muy capaz, sabe lo que quiere y cree mucho en su trabajo. Tiene una gran personalidad... Como Bielsa, prepara muy bien los partidos y tácticamente es muy bueno. Marcelo sacó lo mejor de mí como jugador y como persona. Tengo una gran relación. Le deseo lo mejor. El Inter intentó llevarlo, pero es un tipo de palabra y se había comprometido con el Athletic.

P. Es imposible encontrar alguien que hable mal de usted. ¿Alguna vez dio una patada?

R. Alguna. Y de alguna me sigo arrepintiendo. Contra el Sampdoria en la Copa de Italia di una patada atrás de la que me arrepentí mucho... ¿Fue a Ziegler?

P. Usted ha jugado de todo, ¿dónde se corre mas?

R. Menos de arquero, es cierto, he jugado de todo, incluso alguna vez en punta... En el medio campo se corre mucho, porque por ahí pasa todo.

P. ¿A que rival le costó más defender?

R. A Kaká, cuando llegó al Milan. Y he tenido la suerte de jugar con Ronaldo y Baggio. ¿El mejor que vi? El Ronaldo que conocí era imparable. Tenía fuerza, potencia, velocidad, definía siempre. El peor momento en mis 17 años en Italia fue el día que se lesionó. Me acuerdo de un estadio que se quedó mudo. No olvido el silencio en el campo, era la pena de esa gente... No, en serio, lo que me dio el Inter fue otra cosa: primero una oportunidad. Me abrió las puertas y confió en mí cuando era un joven que iba a probar suerte en otro continente. Y me dio cariño y afecto, me hizo sentir en mi casa. ¿Yo? Prácticamente le di mi carrera entera. Le he dado mi esencia, la esencia que tenía cuando empecé en Talleres, en Banfield, una conducta. Es difícil de explicar, pero no lo imagino de otra manera.

P. ¿Por qué el fútbol argentino no tiene una estructura que impida la fuga de talentos en edad juvenil?

R. Si pudieran, los futbolistas no se irían. Están todas las condiciones para hacer la carrera acá, pero por un bienestar mejor han de marchar. No creo que sea solo un problema del fútbol argentino, el problema está en otro lado, tiene una dimensión social. El problema debe tener solución, todo tiene solución, pero no creo que pase solo por el fútbol, es un problema de educación.

P. ¿El problema de la selección por dónde pasa?

R. No hay tiempo para hacer las cosas. Todo es inmediato. Termina la Copa América y empiezan las eliminatorias. No te juntas, no puedes. No es fácil ser entrenador de la selección y construir un equipo si no te dan tiempo. Pero es la cultura que tenemos, somos tremendamente exigentes y también impacientes. Estamos en camino de poder hacer las cosas, los cambios necesitan tiempo. La continuidad da tranquilidad. En el Inter, cuando gané algo fue cuando hubo continuidad para sacar adelante el proyecto.

P. Después de tantos años sin ganar, un Mundial en 1986, una copa América en 1997, pesa la camiseta más de lo normal?

R. La camiseta pesa. Pero es muy lindo ponérsela.

P. ¿Qué es un Uruguay-Argentina?

R. Un clásico parejo, duro, donde siempre han salido los partidos trabados y cerrados. No va a ser fácil. Como diría Bielsa, más que nada acá se juega el orgullo. Y eso no se vende.

P. ¿Cómo ha encajado Messi lo ocurrido desde que comenzó la Copa América? Están las críticas, la bronca con Burdisso...

R. Es un chico muy inteligente. Aquello fue un problema que empezó en el campo al final del partido y terminó. He jugado mil partidos y he visto mil de esas. Jugamos con Leo y hemos de disfrutarlo. No tiene que escuchar nada, de hecho esto solo pasa en Argentina; sabe lo que pensamos de él y lo que le valoramos.

P. Es el argentino que más veces ha jugado en la Copa América (21). ¿Con qué partido se queda?

R. Con la final que perdimos por penaltis contra Brasil [en 2004]. Jugamos muy bien.

P. ¿Siete años más y lo deja?

R. Tengo contrato y con la selección veremos. Cuando termine la Copa América evaluaremos qué es mejor para todos. No lo sé. Ahora solo me planteo jugar tres partidos más, estas tres finales que nos separan del objetivo que es ganar la Copa América. Luego ya veremos.Siempre días y horas (peninsulares) en España.

Todos los partidos se retraNsmitirán por C+ Liga.

HOY

Colombia-Perú (21.00)

Uruguay-Argentina (00.15)

MAÑANA

Brasil-Paraguay (21.00)

Chile-Venezuela (00.15)

Zanetti conduce el balón en un partido con Argentina.
Zanetti conduce el balón en un partido con Argentina.NICOLO ZANGIROLANI (CORDON PRESS)

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