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Austeridad en las Administraciones

Gallardón exprime la perra chica

La abultada deuda y la prohibición de refinanciarla obliga al Ayuntamiento a medidas de ahorro aún más profundas de las que propugna ahora el líder del PP

Mariano Rajoy tiene un mandamiento: austeridad. Y quiere aplicarlo en las autonomías y municipios ganados el 22 de mayo. Pero el PP ya gobernaba en muchos antes. Es el caso de Madrid: la región la dirige Esperanza Aguirre desde 2003, y de hecho las medidas anunciadas el miércoles por el líder popular se inspiran en la letra y la convicción liberal de los planes de la presidenta autonómica en los últimos años.

Tanto el déficit como la deuda regional están bajo control, aspecto del que no puede presumir el Ayuntamiento. Por ello, el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, que lo es desde 2003 (aunque heredó 12 años de gobierno popular), está inmerso desde hace tiempo en un proceso de ajuste presupuestario que incluso supera en ciertos aspectos las directrices de Rajoy. Algunos recortes vienen de lejos; otros, como una posible reducción de distritos o áreas de Gobierno, se están estudiando ahora.

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- Altos cargos y asesores. "En la diputación de Pontevedra, yo tenía cero asesores; no le digo que ninguno, pero pueden tener muchos menos", aseguró Rajoy. El Ayuntamiento cuenta con 123 altos cargos; esta cifra no se ha recortado en los últimos tiempos, aunque sí el sueldo que cobran, congelado desde 2008 y recortado un 15% el año pasado (eso permitió ahorrar 2,7 millones al año). Además, el Gobierno municipal dispone de 221 asesores elegidos a dedo, a los que se suman 89 más para los grupos políticos (PP, 36; PSOE, 35; IU, 18). Estos últimos deben repartirse de nuevo (o incrementarse) ahora que UPyD entra en el Consistorio. Su labor, de sesgo más político, complementa el de los 27.000 empleados públicos del Ayuntamiento.

- Gastos corrientes. Ahogado por la deuda (y la prohibición del Estado de refinanciarla), el Ayuntamiento está reduciendo a marchas forzadas el dinero que necesita para funcionar. Desde 2008 ha ahorrado 75,3 millones en publicidad (esta partida se ha recortado un 74%), estudios técnicos (43%), viajes, dietas o material. A esto se suma la reducción de plantilla (eliminando los puestos cuyo titular dejaba libre, pero sin despedir). Desde 2009, se ha pasado de 28.150 a 26.422 empleados. Además, ahora cobran menos.

- Edificios. El Ayuntamiento se disemina por 1.571 inmuebles, 73 de ellos alquilados (4,65%). Apretando las tuercas con los contratos ha ahorrado 23 millones. El 0,83% de los edificios municipales está en desuso, en parte a la espera de ser reformados.

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- Compras. Madrid presume de gestión centralizada de compras desde 2003 dentro de su ámbito de gobierno (electricidad, agua, renting o publicidad), y en colaboración con la Comunidad (mobiliario, maquinaria).

- Gastos protocolarios. El presupuesto asigna 292.783 euros a esta partida, de los que 16.400 corresponden al alcalde; 8.180 al vicealcalde; 5.450 a los delegados de las áreas de Gobierno; y 3.630 al resto de ediles. Este dinero (para comidas, visitas, etc.) se redujo un 28% desde 2008; en 2010, además, sólo se gastó un 62%.

- Coches y móviles. "Que todos los concejales tengan coche, pues mire, no", dijo Rajoy. Más allá del anunciado recorte de vehículos oficiales, el Ayuntamiento ha examinado todo su parque móvil (camiones, coches de policía, etc.). Desde 2008, ha ahorrado un 10% con un sistema de renting. En la actualidad tiene 2.950 teléfonos móviles, que suponen un gasto total de 72.000 euros. Sus planes de ahorro pasan, entre otras medidas, por la migración a telefonía IP (llamadas a través de Internet).

- Eficiencia energética. Entre 2003 y 2010 se incrementaron un 12% los puntos de luz (hasta 26.497), pero el aumento de potencia instalada fue solo del 1,4%. Se ha rebajado la intensidad del alumbrado público: iluminar nuevos barrios apenas ha incrementado el consumo total. En los edificios oficiales, cerrar la oficina a las cinco de la tarde ha supuesto un ahorro de 1,31 millones.

- Administración adelgazada. En la pasada legislatura se extinguieron cuatro fundaciones. En el mandato que ahora empieza, el Ayuntamiento promete adelgazar aún más el sector público, pero sin explicar cómo. Rajoy abogó además por "reducir las delegaciones de las autonomías en cada provincia". Eso, aplicado al Gobierno municipal, implicaría un cambio en la división de la ciudad en 21 distritos. Sobre esta modificación (podrían eliminarse todos, o centralizarse en solo cuatro o cinco áreas) se ha hablado mucho en campaña, pero todavía no existe un plan concreto consensuado.

- Pago a proveedores. Quizá sea el punto más espinoso. El retraso máximo del pago a las empresas de recogida de basura es de 10 meses, con una media de siete meses sobre el vencimiento de factura. Si el Gobierno central permite refinanciar la deuda municipal, el PP se compromete a reducir esta demora en tres meses. Si no, todo seguirá igual.

Gallardón, durante un viaje oficial en 2009.
Gallardón, durante un viaje oficial en 2009.JUAN CARLOS HIDALGO (EFE)

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