Ola de cambio en el mundo árabe
El rey Mohamed VI indultó ayer, de una tacada, al mayor número de presos de conciencia -190- desde que fue entronizado hace casi 12 años. Tomó esa decisión sin precedentes a propuesta del Consejo Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), un órgano de asesoramiento en esa materia que él mismo creó hace un mes.
Túnez no puede detener a su exjefe de Estado, Zine el Abidine Ben Ali como hizo el miércoles la fiscalía egipcia con el expresidente Hosni Mubarak, pero sí quiere extraditarlo de Arabia Saudí y que sea juzgado en su país por 18 cargos. Nada menos que otros 44 cargos serán formulados contra su familia y la de su esposa, Leila Trabelsi.
Intervención aliada en Libia
Siguiendo el peligroso precedente de Afganistán, la OTAN constató ayer oficialmente que está corta de recursos para el aire que está tomando la campaña libia y que necesita más aviones de ataque a tierra para neutralizar con precisión las tácticas militares del coronel Gadafi.
La OTAN proclamó días atrás que liberar Misrata, víctima de un asedio medieval desde hace casi siete semanas, era la prioridad indiscutible. Pero tampoco es menos vital esta ciudad para Muamar el Gadafi. La expulsión de los soldados y mercenarios del dictador de la tercera población de Libia les forzaría a un repliegue más cerca de Trípoli, distante 200 kilómetros.
Las cinco grandes potencias emergentes que integran el grupo llamado BRICS -Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- pidieron ayer una "reforma integral" de Naciones Unidas, incluido el Consejo de Seguridad, para dar más voz a los países en desarrollo.
Una nueva amenaza se cierne sobre la eurozona. Esta vez la alarma proviene de Finlandia, donde un partido periférico, de corte populista, nacionalista y euroescéptico irrumpe con fuerza en las elecciones legislativas del próximo domingo. Se trata de Auténticos Finlandeses, al que las encuestas dan un 18% de intención de voto.
El ex primer ministro y exministro de Asuntos Exteriores, Dominique de Villepin, enemigo íntimo de Nicolas Sarkozy (con el que compartió puesto en el Gobierno de Jacques Chirac), ha dado un paso más hacia las elecciones de 2012, en las que, en principio, le disputará los electores a su viejo rival de la derecha francesa.
Japón busca un plan B para controlar la nuclear de Fukushima, en estado crítico desde hace más de un mes. Las dificultades para retirar el agua radiactiva, que dificulta enormemente los trabajos en la planta, llevó ayer a la Agencia Nuclear Japonesa a anunciar que "piensa en otras opciones".