Cartas al director

El Tribunal Supremo y Sortu

En una sociedad que presume de ser democrática, todo aspirante candidato a las urnas es candidato inocente mientras no se demuestre que es candidato culpable. No se debe boicotear a un partido con miles de votantes su pretensión de acceder a las urnas por el hecho de parecer sospechoso, simpatizante o afín a banda armada cuando otros acceden estando imputados. El Tribunal Supremo de Justicia no puede sentenciar a una candidatura aplicando la Ley de Partidos por la intuición de sus togas, visionando el aura de los mismos y por la sospecha de sus almas. Dejemos que Sortu nazca rechazando la viol...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

En una sociedad que presume de ser democrática, todo aspirante candidato a las urnas es candidato inocente mientras no se demuestre que es candidato culpable. No se debe boicotear a un partido con miles de votantes su pretensión de acceder a las urnas por el hecho de parecer sospechoso, simpatizante o afín a banda armada cuando otros acceden estando imputados. El Tribunal Supremo de Justicia no puede sentenciar a una candidatura aplicando la Ley de Partidos por la intuición de sus togas, visionando el aura de los mismos y por la sospecha de sus almas. Dejemos que Sortu nazca rechazando la violencia y camine en democracia, sabiendo tanto ellos como el resto de partidos que siempre existirá una sociedad que velará para que se cumplan las reglas del juego, y que las próximas elecciones sean punto final para un conflicto armado que tantas familias rotas ha dejado, y el punto de partida para un futuro con ilusión.

Más información
Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En