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Vallecas arropa al Rayo

La afición, crítica con Rivero, crea una cuenta para las "primeras necesidades" del equipo

Eleonora Giovio

En la noche del martes a miércoles alguien borró el nombre y apellido de la presidenta del Rayo en el estadio. El que hasta el martes se llamaba Campo de Fútbol de Vallecas Teresa Rivero, amaneció ayer con un Campo de Fútbol de Vallecas, a secas. "Parece que los jugadores no quieran subir a Primera", dijo la presidenta el pasado domingo en Huesca, tras la derrota del Rayo. El martes rectificó, y calificó de "desafortunadas" sus declaraciones.

Teresa Rivero llegó ayer al palco en el minuto 16 y fue acogida con una tremenda pañolada. "¡Teresa vete ya, Teresa vete ya, Teresa vete ya!", le cantaban los aficionados en el estadio -acudieron 11.000 seguidores-. Teresa Rivero no pudo ver la pancarta colgada encima del palco: "Aquí sobra alguien". Pero sí las demás. "Rayo sí, golfos no", "Teresa, que Dios te perdone, la afición no" y "87 años de historia se merecen más respeto". Los hinchas del Alcorcón (ganó el Rayo por 1-0) se solidarizaron con los jugadores locales -llevan meses sin cobrar y el club sufre la suspensión de pagos de Rumasa- y colgaron a su vez otra pancarta contra la presidenta y su marido, el empresario Ruiz- Mateos: "La única familia de Vallecas es el Rayo".

Los jugadores llegaron al estadio con sus coches -la empresa que lleva los autobuses del equipo, Nájera, lleva un año sin cobrar-; en la puerta del vestuario les aguardaban un centenar de aficionados que rompían a aplaudir cada vez que llegaba un futbolista. "El Rayo somos nosotros", cantaban. A pocos metros, en la cafetería Cota, Ángel Domínguez, Gelo para todos, esperaba la llegada de 1.000 camisetas con la frase: "Equipo y afición unidos por un sentimiento". La misma que se enfundaron los jugadores al entrar al campo. "Pedimos 1.000 y vendimos las 1.000 a cinco euros cada una", comentaba Gelo. Es presidente de la peña Planeta Rayista, que hace un par de días aprobó un plan casero para recaudar dinero. "Se llama Fila cero, hay una cuenta en la que cada uno puede ingresar lo que considere. Es para las primeras necesidades del equipo, para poder pagar a los árbitros y los autobuses", dice.

En el minuto 15 de la segunda parte el estadio volvió a corear el "¡Teresa vete ya!". Vallecas huele a fútbol de barrio, a fútbol de verdad. "Me sentiría muy orgulloso de ser futbolista del Rayo, por el apoyo. Con el ambiente que hay es difícil que el futbolista no tire adelante. Este es un sentimiento", dijo Anquela, técnico del Alcorcón. Sandoval, entrenador del Rayo, pidió tranquilidad y calma. "No me han gustado los insultos a la presidenta; hay que tener un poco de respeto. La familia Ruiz-Mateos sabe lo que hay y saben lo que tienen entre manos. Ellos me han pedido perdón y yo pido paciencia", comentó.

Cada vez que le preguntaban por los pagos, el técnico cambiaba de tema. "El fútbol es un estado de ánimo, y los jugadores han salido como un vendaval. Lo han pasado mal porque se ha dudado de ellos. Llevamos tres semanas sin disfrutar del fútbol y hoy se ha trabajado más con el corazón que con la cabeza: queríamos demostrar lo que llevamos diciendo mucho tiempo, que Vallecas es un fortín", concluyó.

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Sobre la firma

Eleonora Giovio
Es redactora de sociedad especializada en abusos e igualdad. En su paso por la sección de deportes ha cubierto, entre otras cosas, dos Juegos Olímpicos. Ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS; ha sido colaboradora de Onda Cero y TVE. Licenciada en Ciencias Internacionales y Diplomáticas por la Universidad de Bolonia y Máster de EL PAÍS.
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