"Para jugar de central siempre hay tiempo"

Es el jugador más joven en alcanzar los 50 partidos con la selección. Es el lateral que más balones roba en la Liga. Es el segundo capitán del Madrid. No ha cumplido 25 años. Se llama Sergio Ramos y quiere más.

Pregunta. ¿Qué ve cuando se pone los DVD de los partidos al llegar a casa?

Respuesta. Veo a un equipo que disfruta jugando al fútbol, que está muy bien trabajado, que sabe dosificar y dominar los tiempos del partido, cosa que antes no controlábamos tanto, y que tiene un muy buen estado físico. El estado físico nos está ayudando.

P. ¿Cuál es el aporte táctico de Mourinho?

R. Es un perfeccionista que contagia perfeccionismo. Eso hace que cada uno se supere. En cada entrenamiento. Es una persona muy directa, que tiene muy buen contacto con el jugador, y eso da tranquilidad cuando saltas al campo. Durante toda la semana te va contando cómo es el equipo que vas a enfrentar y el jugador que te va a tocar por tu banda. Te mantiene al tanto.

"Ahora me ayuda Di María. En otras etapas nuestros extremos no estaban para defender"

"Mourinho es extraordinario en todo. Es el jefe de la cuadrilla"

"Tenemos que matar los partidos, no ganar el premio al 'fair play' ni al juego bonito"

P. ¿Levanta la voz?

R. No grita mucho. Es muy directo cuando critica al jugador. No hace falta chillar para que te entrenes mejor. Diciéndotelo a la cara, claramente, y con honestidad, sobra.

P. ¿Es capaz de hacer reír?

R. Claro. Con los jugadores es extraordinario en todo. Cuando hay que estar serio se está y cuando hay que bromear es el primero en estar de cachondeo.

P. ¿Da miedo?

R. Tampoco. Pero sí que impone respeto. Es el jefe de la cuadrilla. Lo que él diga está por encima de todo.

P. ¿Cómo se entrenan?

R. Normalmente, el estado de ánimo de los jugadores que menos minutos tienen no suele ser el mismo de los titulares. Pero con Mourinho tienen que demostrar lo contrario en cada partidillo. Mourinho presiona mucho. Y siempre se trabaja con balón. A mucho ritmo. Cambiando ejercicios. El cuerpo lo nota.

P. ¿Y la preparación física?

R. Con balón. Aquí hemos tenido de todo. Hubo entrenadores que nos ponían carrera continua, ejercicios de resistencia. Nos llevaban a Austria a subir montañas. Con Mou siempre fue todo balón. Y ahora nos encontramos fenomenal sin haber sufrido.

P. ¿Hablaron previamente de jugar con un defensa menos en caso de tener que remontar, como ocurrió en Alicante y Milán?

R. No. Son improvisaciones del míster.

P. ¿Dónde quiere situar a la defensa?

R. La distancia entre los defensas y el portero no cambió. Lo que ha cambiado es la distancia entre la línea de centrocampistas y la defensa. Estamos más juntos y replegados para hacer las coberturas y las permutas.

P. Ahora juegan con dos medios centros, como el año pasado, pero Khedira no cierra su banda, como hacía Lass.

R. Eso sucede por dos razones. Primero porque Di María también ayuda. Segundo porque me controlo un poco más a la hora de subir. Con el tiempo he aprendido a darme cuenta de las necesidades del equipo en cada momento, según el rival, el resultado, los minutos que le quedan al partido...

P. ¿Qué piensa de Di María?

R. Todos los compañeros estamos muy contentos con él. Ayuda a defender y después te marca las diferencias con la velocidad y la calidad técnica. Creo que en general nos compaginamos muy bien tanto con Sami [Khedira] como con Fideo

para hacer un trabajo defensivo en conjunto. Fideo será un futbolista importante.

P. Usted es el lateral de la Liga que más balones roba. Uno cada siete minutos. ¿Por qué?

R. Me alegra irme superando. Como me alegra ver que ya no me sacan tantas tarjetas. Solo llevo dos. Para mí es un récord. Y está relacionado con las recuperaciones. Mi concentración es mejor. El estado de ánimo es muy importante para eso. Para un futbolista la confianza en uno mismo es fundamental. Después de seis años en el Madrid, como segundo capitán, me siento en un gran momento mental y físico.

P. ¿Ve al Barça fatigado?

R. No veo al Barça del año pasado haciendo el fútbol que hacía disfrutar a todo el mundo. Los rivales se le oponen, conocen cada día más su juego, y cada vez le cuesta más trabajo ganar.

P. ¿El derbi está devaluado?

R. Para nosotros un derbi se vive de forma diferente. El Atleti es el Atleti. Es como el clásico. No me motiva porque lo pida la grada. Como jugador te gusta ganarle al Atlético y al Barça. Son cuatro partidos que marcan. Es cierto que llevan muchísimos años sin ganarnos. Pero queremos que sigan así. A mí me gusta esa rivalidad. Me gustaba vivirla con el Sevilla-Betis y lo disfruto con el Atleti. Salgo al campo diferente. Pero es una cuestión más mía que de Mou. Él intenta que no valoremos eso. Es un enfermo de la concentración: quiere la misma tensión en San Siro que en Alicante.

P. En Milán dijo que el Madrid no sabe competir en Champions. ¿A qué se refiere?

R. Tenemos que aprender a matar los partidos. No estamos ni para ganar el premio al fair play ni para hacer juego bonito. Los pequeños errores son decisivos.

P. ¿Se fue al Mundial preocupado por el fichaje de Maicon?

R. Para nada. Me fui con muchas ganas de hacer un gran Mundial y de demostrarle a todo el mundo que puedo jugar como lateral. Sabía que si Mou venía yo iba a tener un trato directo con él y si tenía que disputar un puesto no iba a tener problemas. Tanto de lateral como de central.

P. ¿Cuándo habló Mourinho por primera vez con usted?

R. Me llamó por teléfono cuando se supo que iba a venir. Y la verdad que muy bien. Llamó a todos los internacionales, prácticamente. Esas cosas hacen que el míster marque la diferencia en todos los aspectos. Me dijo que tenía que demostrar quién era yo en un Mundial. Que me quedara tranquilo. Y me deseó suerte.

P. ¿Y qué más le dijo?

R. Me preguntó si quería jugar de lateral y le dije que sin problemas. Me dijo que existía la opción de Maicon, pero que no iban a pagar una cantidad de dinero por un jugador de cierta edad. Y la verdad es que lo hago encantado. Disfruto mucho jugando al fútbol y mi estado físico me permite hacerlo en esa posición.

P. Pero el año pasado prefería ser central.

R. Para jugar de central siempre hay tiempo. Ahora aprovecho mi estado físico. El día de mañana ya veré. Si sale un superlateral derecho y el Madrid lo ficha, y tengo que jugar de central, también estoy encantado.

P. Hay una diferencia: ahora no se tiene que ocupar usted solo de trabajarse toda la banda.

R. Fideo ayuda. Siempre le estoy hablando. Vamos los dos a presionar. En otras etapas teníamos a dos extremos fijos: Cristiano y Robben, o Robben y Robinho, que eran dos jugadores que solo atacaban, no defendían.