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El lehen dakari emplaza a PNV y PP a subir los impuestos a los más pudientes

López se dirigió a ambos partidos en vísperas del encuentro Basagoiti-Urkullu

"Les pido que se lo piensen". El lehendakari, Patxi López, aprovechó ayer, en Vitoria, un acto de cargos socialistas alaveses para llamar al PNV y al PP a que reconsideren su negativa a abordar cambios en la fiscalidad, en particular para subir los impuestos a las rentas más altas. El llamamiento lleva implícita una crítica y un desacuerdo, tanto respecto de su socio preferente, como del primer partido de la oposición y gobernante en las tres diputaciones, en las que reside la competencia fiscal.

La apelación del lehendakari precedió al encuentro de mañana entre los máximos dirigentes de ambos partidos de centro derecha, Antonio Basagoiti e Iñigo Urkullu, respectivamente. Su coincidencia en la materia será un importante elemento de complicidad. Se trata, además, de un terreno en el que el Gobierno vasco depende de las diputaciones forales, el ámbito institucional ahora monopolizado por el PNV y al que el PP tiene las más serias aspiraciones y posibilidades de llegar en Álava tras las elecciones de 2011.

Prieto: El 'caso De Miguel' "invalida al PNV para repetir" al frente de Álava

López no ha dejado de llamar a los diputados generales a esa reflexión desde que llegó al Gobierno. Es conocida su explicación de que no se pueden pretender servicios nórdicos con una presión fiscal del 30%, más de diez puntos por debajo de la que impera en los países a los que se acude como modelo. Oponerse a subir impuestos "queda muy bien para la galería, pero no es justo ni sostenible", dijo ayer López, que no ve otro modo de mantener los servicios actuales que no sea un aumento de la presión fiscal añadido al incremento de ingresos públicos que proporcione el crecimiento económico. Además, aseguró, "la única forma de que las rentas más altas pongan lo que les corresponde es a través de los impuestos". López agradeció también a su socio la disposición a aprobar el proyecto de ley que recogerá los recortes del Gobierno. El lehendakari aprovechó para emplazar a diputaciones y ayuntamientos a seguir el ejemplo del Gobierno y realizar sus propios ahorros.

Por su parte, el secretario general del PSE-EE en Álava, Txarli Prieto, se mostró sorprendentemente explícito respecto del PNV y el caso De Miguel. Lanzó a ese partido la grave acusación de estar "organizado en lo político y lo institucional para amañar contratos" y dirigir las "oportunidades a sus amigos", además de atribuirle un "perfil bajo" en el gobierno de la Diputación alavesa, donde Prieto le respalda. Está "descolocado, noqueado, y el diputado general no lidera nada, salvo alguna idea de folleto", dijo. Prieto afirmó que existe ya "una reprobación política y ética al PNV que le invalida para repetir" al frente del ejecutivo foral.

Prieto fue el único otro orador en la parte pública del acto, pese a la presencia allí del alcalde de Vitoria, Patxi Lazcoz, máxima representación del PSE-EE en Álava con responsabilidades de gobierno.

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