Cerrada la empresa A.Q. Ediciones por suspensión de pagos

Las empresas A. Q. de Ediciones y A. Q-. Distribuciones, de las que es principal titular Agustín de Quinto, han cerrado en la mañana de ayer sus locales de la cal le de Orense, 34, donde se encontraba ubicada la redacción del semanario La Jaula. Ayer, a la hora de entrada, se impidió a los trabajadores el acceso a sus puestos de trabajo, mientras que se transmitía al personal administrativo la orden de presentarse en otra sede social de la empresa, situada en la calle de Juan Hurtado de Mendoza. El pasado lunes, en un contacto telefónico mantenido por Agustín de Quinto con el redactor-j...

Las empresas A. Q. de Ediciones y A. Q-. Distribuciones, de las que es principal titular Agustín de Quinto, han cerrado en la mañana de ayer sus locales de la cal le de Orense, 34, donde se encontraba ubicada la redacción del semanario La Jaula. Ayer, a la hora de entrada, se impidió a los trabajadores el acceso a sus puestos de trabajo, mientras que se transmitía al personal administrativo la orden de presentarse en otra sede social de la empresa, situada en la calle de Juan Hurtado de Mendoza. El pasado lunes, en un contacto telefónico mantenido por Agustín de Quinto con el redactor-jefe del semanario anunció al periodista que la empresa A. Q. Ediciones había presentado expediente de suspensión de pagos. Interrogado acerca de su paradero, Agustín, de Quinto se negó a facilitarlo.En la mañana de ayer, los redactores acudieron a las oficinas que la empresa mantiene abiertas y se les informó que la redacción había sido cerrada siguiendo órdenes dictadas telefónicamente por Agustín de Quinto. Los redactores preguntaron al jefe de distribución, señor Adventosa, que representa actualmente los intereses del principal titular de la empresa, dónde se encontraba el señor De Quinto, a lo que respondió que lo ignoraba, pero que, desde luego, fuera de España. A la pregunta sobre si su ausencia significaba que había huido, respondió textualmente: «Todo puede ser. »

A preguntas de los trabajadores, el señor Adventosa señaló que esperaba instrucciones para efectuar nuevos despidos.

La actual situación afecta a una treintena de trabajadores. Por otra parte, en fuentes próximas a la redacción aseguraron a EL PAIS que el señor De Quinto tiene unas deudas por un valor aproximado de sesenta millones de pesetas.