"Venimos a repartir mantas de parte de Ángel Fenoll"
Ángel Fenoll empresario afín al Partido Popular de Orihuela, primer imputado del caso Brugal (extorsión con grabaciones) y en libertad provisional desde el mes de julio de 2007 por esos hechos, ha irrumpido en la escena pública tras dos años de silencio. El controvertido industrial, cuyos negocios han estado ligados desde finales de los ochenta al gobierno del PP de Orihuela, obsequió las pasadas Navidades con un cargamento de mantas a familias pobres de cuatro barrios de la ciudad: Rabaloche, Capuchinos, San Isidro, San Antón y Calle de Arriba.
La solidaria iniciativa no estuvo exenta de matices políticos: entre los generosos distribuidores de estos regalos estaban, entre otros, Carmelo Soñer, ex alcalde pedáneo, y Juan Antonio Sánchez López, futuro alcalde pedáneo de estos barrios a propuesta de la alcaldesa Mónica Lorente, del PP, según él mismo se atribuye. Varios vecinos confirman en una grabación posterior al reparto de las prendas de abrigo que los dos políticos participaron en la entrega en nombre de Fenoll.
"Venimos de parte de Ángel Fenoll a repartir mantas". Con esta frase un grupo de mujeres de la Asociación Ágora de la partida de La Aparecida de Orihuela y el antiguo alcalde pedáneo, Carmelo Soñer, junto al futuro alcalde, Juan Antonio Sánchez, dedicaron el pasado mes de diciembre a visitar las casas de las familias más humildes para entregarles mantas. El Ayuntamiento, que preside Mónica Lorente, del PP, se ha desvinculado de la iniciativa de Fenoll y niega que haya propuesto a Sánchez López el cargo de alcalde pedáneo de esos barrios.
La actividad empresarial de Fenoll ha pivotado a la sombra del consistorio oriolano. A finales de los ochenta el ex alcalde Luis Fernando Cartagena le adjudicó a dedo el servicio de recogida de basura de las urbanizaciones de las playas del municipio. El empresario ha facturado con estos negocios cifras multimillonarias en las últimas dos décadas.
La relación empresarial de Fenoll con el consistorio se extinguió en octubre de 2008. En esa fecha el Ayuntamiento adjudicó a una nueva firma la contrata de basura que engloba los servicios de la firma de Fenoll. El empresario aún reclama a través de cuatro contenciosos administrativos cerca de seis millones de euros por facturas impagadas. Las diligencias del caso Brugal siguen bajo secreto del sumario desde mayo de 2007.
