_
_
_
_
_

El comercio de Alicante exige una moratoria para grandes superficies

El penúltimo día hábil para presentar alegaciones al nuevo PGOU de Alicante se tradujo en una avalancha de propuestas. Solo las que presentaron los comerciantes de Alicante, Ecologistas en Acción, el Grupo Socialista municipal y el colectivo Salvem Fontcalent superaban las 400.

El Colectivo de Comerciantes por Alicante reclamó en su escrito que durante diez años el PGOU no permita instalar grandes centros comerciales en la ciudad, según explicó Pedro de Egea, presidente del colectivo. Los comerciantes argumentan que Alicante tiene ya el doble de metros cuadrados por habitante de gran superficie comercial que la media española. El pequeño comercio esgrime también el compromiso del ex alcalde, Luis Díaz Alperi, de no permitir más centros de este tipo en el nuevo PGOU. El comercio plantea, además, reducir "mucho" la instalación de grandes supermercados. La alegación no afecta a la presencia de grandes comercios, como Ikea.

Ecologistas en Acción, por su parte, presentó 31 alegaciones al futuro planeamiento urbano de la ciudad. El colectivo conservacionista, entre otros, considera que la demanda de viviendas en la memoria justificativa incurre "en graves errores" en la contabilidad. El colectivo también critica que el PGOU pretende permitir "niveles de contaminación acústica ilegales". Y en otras de sus alegaciones apunta que el soterramiento del tráfico en el litoral de Alicante "arrasaría los ficus del Parque de Canalejas", que el planeamiento debe establecer para la Sierra, el Saladar de Agua Amarga y las Lagunas de Fontcalent "un grado de protección suficiente", que el tratamiento de la fachada litoral es agresivo, y rechaza el nuevo sector urbanizable en el entorno del Saladar de Agua Amarga por su perjuicio sobre el humedal.

El grupo ecologista también rechaza el parque de viviendas, especialmente las 20.000 nuevas casas previstas en el sector de La Condomina, último reducto de la huerta tradicional alicantina.

Y el Grupo Socialista presentó en registro, finalmente, 158 alegaciones. Alternativas planteadas a un documento "chapucero", en palabras de su portavoz, Roque Moreno. Los socialistas reclaman que se descarte el soterramiento del tráfico en la avenida del Conde de Vallellano (fachada litoral) por su elevado coste, propone un cinturón verde y la peatonalización de todo el casco histórico. El PSPV reclama una nueva exposición tras el debate de las alegaciones.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_