Platini se quejó por carta a Zapatero

El presidente de la UEFA, Michel Platini, envió el lunes de la semana pasada una carta al presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, en la que mostraba su disconformidad con la "contundencia" de la policía española. "Qué casualidad que ese mismo día el Marsella presentara por su cuenta una denuncia con los supuestos incidentes del Calderón", advierten en el Atlético. "No fue así. Se mandó antes porque ya hubo otros problemas la temporada pasada con la actuación de la policía española en sus estadios", puntualizan desde Nyón.

La respuesta del Gobierno no se hizo esperar. Ya por la mañana, Zapatero, que acudió a la cita de los 27 jefes de Estado de la Unión Europea en Bruselas, mostró su respaldo "al Atlético y a la Policía". Por la tarde, el Ejecutivo, que anunció "gestiones" para que la UEFA "reconsidere la sanción", adelantó que responderá a la misiva de Platini defendiendo la actuación de las fuerzas de seguridad cuando cargó contra los hinchas del Marsella. Una intervención "correcta", según la Delegación del Gobierno, y "desproporcionada", según la UEFA: "No es la primera vez que se dan cargas tan injustificadas. Ya pasó hace dos años en Sevilla, cuando los seguidores del Tottenham fueron golpeados, y, a principios de este año, en el mismo Calderón, cuando ocurrió algo igual en la visita del Bolton".

Platini ya adelantó cuál sería su posición en el caso Atlético el pasado viernes. En una entrevista concedida al diario francés La Provence, aseguró que el veredicto contra el club madrileño sería "rápido y severo". Para dejar clara su posición, añadió: "Si la Comisión de Disciplina impone una sanción que no estimo apropiada, yo mismo puedo recurrirla". El presidente de la UEFA también anunció que el entrenador rojiblanco, Javier Aguirre, no iba a escaparse de la quema. "Normal, ya que fue un mal ejemplo para los amantes del fútbol. Su actuación no fue acorde con el juego limpio", aseguran en la UEFA, donde apuntan que el entrenador mexicano "despreció" a Valbuena, delantero del Marsella, llamándole "cabrón e hijo de puta". Por esa razón, Aguirre fue sancionado con los dos próximos partidos de la Champions lejos del banquillo. "No es algo tan raro. En su momento, José Mourinho fue sancionado por asegurar que el árbitro y el Barcelona se confabularon en una eliminatoria contra el Chelsea".

Platini, que en la última reunión de la UEFA en Montecarlo advirtió de que sería "extremadamente duro" en las penas a los clubes, se sintió "sensibilizado de manera inevitable" tras recibir varios correos "de aficionados marselleses discapacitados". Se refería al testimonio de René Poutet, presidente de una peña de seguidores inválidos del Olympique que aseguraban haber recibido escupitajos y algún botellazo de los radicales del Atlético.

"Sabemos que van a estar más pendientes que nunca de nosotros. Así que actuaremos de inmediato si vemos el menor amago de violencia o cualquier bandera preconstitucional, aunque sea diminuta", observa un directivo del Atlético. "A ver si es verdad", interviene Esteban Ibarra. El responsable de Movimiento contra la Intolerancia culpa a los seguidores del Marsella "por su agresividad manifiesta", pero recuerda que "en el Calderón es habitual que haya gritos racistas, alusiones franquistas y otros asuntos graves". "Es una lástima que dispongamos de una de las leyes más avanzadas para combatir la violencia y la discriminación en el deporte y se aplique con tan poca fuerza. Se debería seguir el ejemplo de Inglaterra, donde las pancartas, cualquiera que sea el mensaje, están prohibidas en los terrenos de juego", concluye.