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Solbes ve difícil cumplir con el objetivo para este año

El superávit del 1,2% previsto para 2008 es ya una quimera. El vicepresidente y ministro de Economía, Pedro Solbes, admitió ayer que será difícil lograr esa cifra para el conjunto de las administraciones públicas (central, autonómicas, locales y Seguridad Social). La evolución adversa de los ingresos del Estado en los últimos meses y el más que posible empeoramiento de comunidades y ayuntamientos -aún no se conocen datos- alejan el objetivo de estabilidad para este año.

Tras los datos conocidos ayer, existe "una probabilidad mayor" de que el dato se descuadre, reconoció Solbes en los pasillos del Congreso. El Gobierno ya ha admitido que la administración central, con un déficit de casi un punto, cerrará el año en números rojos, frente a las cuatro décimas de superávit que debía registrar. Ese organismo no volverá al excedente al menos hasta 2011, según las últimas previsiones oficiales.

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En todo caso, el vicepresidente, dado a la cautela, puntualizó que aunque los datos van "en la dirección de distanciarse de lo presupuestado", aún es "un poco pronto" para sacar conclusiones. El saldo conjunto anual de todas las administraciones públicas se conocerá en el primer trimestre de 2009.

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