Cartas al director

Derechos y simios

Deseo, aunque no espero, que el pleno del Congreso de los Diputados rechace la resolución de la Comisión de Agricultura, Medio Ambiente y Pesca en apoyo del proyecto Gran Simio que, según Peter Singer en su artículo publicado en EL PAÍS el pasado 11 de agosto, declara que "un animal puede ser individuo con sus derechos". Me parece otra expresión del progresismo frívolo y acelerado que ha invadido nuestro país: ningún otro Parlamento en el mundo ha considerado el proyecto.

Sólo el ser humano tiene autonomía y sentido moral. Sólo el ser humano es persona con dignidad esencial, capaz de re...

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Deseo, aunque no espero, que el pleno del Congreso de los Diputados rechace la resolución de la Comisión de Agricultura, Medio Ambiente y Pesca en apoyo del proyecto Gran Simio que, según Peter Singer en su artículo publicado en EL PAÍS el pasado 11 de agosto, declara que "un animal puede ser individuo con sus derechos". Me parece otra expresión del progresismo frívolo y acelerado que ha invadido nuestro país: ningún otro Parlamento en el mundo ha considerado el proyecto.

Sólo el ser humano tiene autonomía y sentido moral. Sólo el ser humano es persona con dignidad esencial, capaz de recibir y ejercer derechos. Williard Gaylin, reconocido bioético americano, dijo hace algunos años (The Hastings Center Report, 14.4) que a menudo, cuando se habla de los derechos de los animales, no es más que un velado ataque a la dignidad del hombre. Desde luego que los simios y todos los animales han de ser tratados sin crueldad. Pero los simios no son personas, ni siquiera con el voto favorable del Congreso español.

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