Europa reduce por primera vez la ayuda al desarrollo en contra de su compromiso
A pesar de las promesas, las ayudas al desarrollo de los países ricos volvieron a descender por segundo año consecutivo en 2007. El aspecto más inquietante de este recorte es que por primera vez la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) de la Unión Europea registrará un descenso de 1.600 millones de euros, una cantidad equivalente a la financiación de 4.500 escuelas o 1.200 hospitales.
Con todo, los Veintisiete fueron el año pasado el primer donante mundial, con un total de 46.100 millones de euros frente a los 47.700 millones del año anterior. España, sin embargo, aumentó su aportación al desarrollo el año pasado.
La Comisión Europea expresó ayer su preocupación porque el descenso de la ayuda al desarrollo "pone en peligro los objetivos del milenio de reducir la pobreza extrema a la mitad", según un alto funcionario. Es decir, reducir a la mitad los 1.000 millones de personas que viven en la pobreza extrema, con menos de un dólar diario, entre 1990 y 2015.
Una fuente de la Comisión manifestó: "Estamos seriamente preocupados por la tendencia mundial". Y recordó que en la cumbre de Monterrey de 2002, los donantes internacionales se comprometieron a elevar sus niveles de ayuda, promesas que han caído en saco roto.
A pesar de los recortes, la UE es todavía el mayor donante en el mundo con 93 euros por habitante, frente a los 53 euros de Estados Unidos y 44 de Japón. Más que plantear la ayuda como una caridad, la UE ve estos fondos como un instrumento para afrontar los desafíos globales como la emigración y el cambio climático.
Un documento interno de la Comisión advierte de que si los compromisos no son respetados y no se incrementan sustancialmente las ayudas, "tendrá efectos devastadores para los países en desarrollo", y "minará seriamente la credibilidad de la UE".
No obstante, los países pobres cada vez cuentan menos con las ayudas al desarrollo y se apoyan más en sus propias fuerzas a través de las remesas de sus emigrantes, según las estimaciones del Banco Mundial.
