Historias para el verano
Una manera de que los jóvenes se acerquen a la lectura es a través de libros actuales escritos para ellos, que los hacen sentir parte del presente y de sus intereses temáticos y literarios. Algunos de los que están funcionando bien, según las especialistas Gemma Lluch y Elsa Guiar, son:
Memorias de Idhún (SM), de Laura Gallego. Es una trilogía que incluye fantasía y aventura cuando en Idhún se produce la conjunción astral de los tres soles y las tres lunas con lo cual Nigromante se hace con el poder y los jóvenes Jack y Victoria lideran la resistencia en una carrera de hechos sorprendentes. Tiene página web y foros.
Crepúsculo (Alfaguara), de Stephenie Meyer. Fantasía, amor y vampiros que cuentan que Isabella se fue a vivir cerca de Washington y allí conoció a Edward, hasta descubrir su secreto vampírico que pone en riesgo a la ciudad. Tiene página web y foros.
El ejército negro (SM), de Santiago García-Clairac. Mezcla la vida actual de un muchacho cuyos sueños se desarrollan en la Edad Media donde hay dragones, reyes y asesinos.
El clan de la loba (Edebé), de Maite Carranza. Fantasía, búsqueda, huida y aventura que incluyen mundos de brujas y profecías.
Titus Flaminius (Edelvives), de Jean-Francois Nahmias. Es una colección en la que un joven detective romano en tiempos del imperio se enfrenta a crímenes y delitos.
Cordeluna (Edebé), de Elia Barceló. Narra y describe las emociones a través del tiempo.
La torre y la isla (Anaya), de Alonso y Javier Pelegrín. Nueva mirada a la ciencia-ficción: en el año 2121 cuatro chavales resultan inmunes ante cualquier enfermedad.
Pedro Cerrillo sugiere libros de Ricardo Gómez, Care Santos, Gonzalo Moure y José María Merino. Antonio Basanta recomienda la página web de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez dedicada a la orientación de lecturas en sus distintas edades: sol-e.com.
Mundialmente uno de los éxitos es El niño con el pijama de rayas (Salamandra), en cuyas páginas el irlandés John Boyne aborda el tema de la II Guerra Mundial.