El primer ministro británico, Tony Blair, y el presidente estadounidense, George Bush, que comparten serios problemas por la guerra en Irak, admitieron tras su reunión en Washington que cometieron diversos errores en la ocupación del país, aunque defendieron que los iraquíes están mejor sin Sadam Husein. Entre las equivocaciones, el presidente norteamericano mencionó los malos tratos en la cárcel de Abu Ghraib y su retórica agresiva y triunfalista.
Una falsa alarma provocada por unos supuestos disparos sembró ayer la inquietud en el recinto del Capitolio, sede del Congreso estadounidense, y obligó a la policía a cerrar momentáneamente dos de los edificios. "Los sonidos estridentes pudieron haber sido provocados por los trabajos que se llevan a cabo en uno de los ascensores", explicó la sargento Kimberly Schneider, portavoz de la policía especial del Capitolio.
Los excesos vuelven a manchar la actuación de las fuerzas de Estados Unidos en Irak. La prensa estadounidense revelaba ayer detalles de una investigación sobre la muerte de dos docenas de civiles, entre ellos mujeres y niños, a manos de un grupo de marines que actuaron de forma "indiscriminada" y "metódica", en represalia por una bomba que estalló el pasado 19 de noviembre al paso de un convoy en la ciudad de Haditha y que acabó con la vida de un soldado estadounidense.
ANDREU MISSÉ | Bruselas
Los ministros de Exteriores de la UE se reúnen en Viena para debatir el futuro de la Unión tras el fracaso de la Constitución
El papa Benedicto XVI completó ayer, segundo día de su viaje a Polonia, una dura jornada de ceremonias y encuentros religiosos que le llevó de Varsovia a Czestochowa y de esta ciudad a Cracovia, que será su base de operaciones durante el resto de su estancia en este país.
El Gobierno de Hamás decidió ayer ceder terreno en las calles al tiempo que rechazó concesiones en el campo político. Acuarteló a los 3.000 milicianos que patrullaban desde hace 10 días las ciudades de Gaza, dando así un respiro a la lucha con la policía fiel al presidente, Mahmud Abbas. Pero al mismo tiempo el primer ministro, Ismail Haniya, negó que Hamás vaya a reconocer el Estado de Israel como exigió Abbas.