Huelva Acoge constata el descenso de inmigrantes asentados en chabolas

La ONG Huelva-Acoge presentó ayer su informe sobre los asentamientos chabolistas de trabajadores inmigrantes en la provincia onubense durante el 2005, en el que se recoge el considerable descenso en el número de personas que habitan estos campamentos, que ha pasado de los 3.500, en 2001, a los 1.200 de la pasada campaña y los 400 del presente año, la inmensa mayoría provenientes del África subsahariana.

Pese al positivo descenso, Huelva Acoge sigue alertando de las infrahumanas condiciones de vida que estos trabajadores deben afrontar, sin agua corriente, casi a la intemperie y bajo lonas de plástico. Una de las medidas que los representantes de la organización recomendaron ayer fue la de potenciar los contratos en origen de trabajadores en sus países, tal y como se hace con los de Europa del Este.

La presidenta de Huelva-Acoge, Nieves Robles, defendió la necesidad de aplicar la técnica de los contratos en origen en los países exportadores de población (fundamentalmente Malí) afirmando que la mayoría de los contratados de esta manera "pertenecen ya a países de la UE, por lo que puede ser para ellos menos atractiva la experiencia migratoria. Algo que sí hacen los trabajadores subsaharianos, aun sin contar con papeles", afirmó.

Como razones que expliquen el descenso de trabajadores acampados en los montes públicos de Huelva, Javier Pérez, responsable de temporeros de Huelva-Acoge, adujo los sucesivos procesos de regularización y, sobre todo, el hecho de que "muchos inmigrantes saben ya que los puestos de trabajo agrícola en Huelva están ocupados y dejan de venir".

En el informe, la ONG indica los cinco puntos donde se encuentran los asentamientos: Lepe -donde se concentra el mayor número de personas, unas 120-, Mazagón, Moguer, Palos de la Frontera y Lucena del Puerto. "En estos campamentos se vive en las mismas condiciones que lo hacen los asentados que se preparan para saltar la valla de Melilla. No tienen nada.", dijo Pérez.

Semejante situación no es una opción, según los responsables de la ONG. Por ello, piden que, además de formalizar convenios para tramitar contratos en origen, se construyan albergues de acogida en la provincia. En este sentido, la consejera de Gobernación, Evangelina Naranjo, recordó ayer a los ayuntamientos que su departamento ofrece todos los años un presupuesto para la mejora y construcción de albergues. La consejera también señaló que la Junta trabaja para levantar los asentamientos chabolistas de inmigrantes temporeros en Huelva, fundamentalmente en Lepe, Palos de la Frontera y Moguer.