Álvarez insiste en que Chaves miente sobre la propuesta del Estatuto y debe disculparse

El secretario general del Partido Andalucista (PA), Julián Álvarez, negó ayer haber entregado nunca al presidente de la Junta un documento en el que esta formación aceptara una definición para Andalucía diferente a la de nación en el preámbulo del nuevo Estatuto de autonomía. "Es una mentira de Chaves", insistió Álvarez, y aseguró que no volverá a reunirse con el presidente autonómico "hasta que pida disculpas y rectifique". El dirigente andalucista dio por "interrumpidas" las relaciones entre su partido y el PSOE, aunque matizó que no afectará a acuerdos municipales de gobierno.

Desde que el pasado sábado dirigentes del PSOE informaran de que Julián Álvarez entregó "en mano" a Manuel Chaves un documento sobre la propuesta del PA para la redacción del preámbulo y del artículo 1 del Estatuto en el que no consideraba Andalucía como nación, Álvarez había mantenido silencio y había dejado la réplica a otros dirigentes andalucistas. Ayer habló del asunto por primera vez en una conferencia de prensa en Málaga, en la que negó la mayor, y tachó de mentiroso al presidente de la Junta, quien el lunes confirmó que recibió tal documento. "Andalucía no se merece un presidente que miente, que no cree en ella y que está dispuesto a traicionarla por intereses electorales y políticos", expuso Álvarez, quien se reconoció afectado porque "está en juego mi rigor y mi coherencia".

El dirigente andalucista arremetió contra la actitud del PSOE, partido del que dijo ha mantenido demasiados "vaivenes" desde que se inició el debate de la reforma estatutaria. "Creen que tienen todo el poder, todo el dinero y todos los medios de comunicación y que pueden convertir una mentira en verdad".

Insistió en que el PA siempre ha defendido que Andalucía es una nación, porque entre otros argumentos, no hacerlo sería "rebajarse" frente a Cataluña y que jamás ha propuesto otra cosa, "ni verbal ni documentalmente". "No he entregado ningún documento que acredite eso durante la pasada cumbre de líderes", dijo.

Pese a considerar que toda la polémica parte de una mentira del PSOE, Álvarez reprendió a Chaves porque haya faltado al respeto de "conversaciones privadas entre partidos". Explicó que en los últimos meses ha mantenido varias reuniones con el presidente de la Junta -no quiso decir el número, aunque fuentes del Gobierno precisan que fueron tres: 9 y 16 de febrero y 2 de marzo-, de las que nunca ha informado porque Chaves le pidió que las mantuviera "en secreto". "Pero él se lo ha saltado a la torera", se quejó, y consideró "gravísimo e insólito que el presidente haya roto el secreto de las conversaciones pretendiendo obtener réditos políticos".

Después de que el presidente de la Junta asegurara personalmente que Álvarez le entregó el polémico documento (en una de esas tres reuniones), los socialistas no han abundado más en la controversia. Únicamente, el portavoz del Gobierno, Enrique Cervera, habló ayer para dar por "zanjado" el tema y aseguró que el Ejecutivo está dispuesto a hacer todos los esfuerzos posibles para alcanzar el consenso.

Fuentes socialistas reiteraron ayer que el documento consta, además del preámbulo y del articulo 1, de otra decena de temas, entre ellos las comarcas, las elecciones autonómicas, la deuda histórica. La interpretación que el PSOE hace de la "marcha atrás" de Álvarez es en clave interna: "Quizás se deba a que no consultó con su ejecutiva". Este órgano se reunió ayer con el único objetivo de respaldar a su líder.