José Bono, ministro de Defensa, anunció ayer que no cederá a Barcelona el castillo de Montjuïc si no se le garantiza el cumplimiento de tres condiciones de las que una es la principal: que en el edificio ondee la bandera española.
El puerto de Barcelona ha iniciado un proceso de adaptación de sus terminales de pasajeros para aumentar las medidas de seguridad y equipararlas a las que funcionan en el aeropuerto de El Prat. Un reglamento comunitario de 2004 aconsejaba la aplicación de estos filtros, que, en la práctica, comportan la separación del equipaje de los pasajeros.
El año pasado desembarcaron en el puerto de Barcelona 1,2 millones de pasajeros que estaban realizando un crucero y también entraron, salieron o hicieron escala otro millón de personas que viajaban en barcos de líneas regulares.
Comisiones Obreras (CC OO) y Fomento criticaron ayer la actitud del Gobierno catalán para desarrollar los contenidos del pacto por la competitividad.