El Gobierno valenciano cierra un banco de sangre de cordón umbilical

Una empresa valenciana, Biostab Proresurgo, SL, ha retado a las autoridades sanitarias al crear un banco de sangre de cordón umbilical privado sin comunicárselo a la Generalitat ni pedir ningún tipo de permiso. El Ministerio considera esta práctica ilegal ya que la Ley de Trasplantes establece que éstos deben ser no lucrativos. La Generalitat decidió ayer el cese cautelar de la actividad de la firma al tener conocimiento de los hechos.

"Como no hay legislación al respecto, hemos tirado por la calle del medio y hemos puesto en marcha la empresa". Así justificó ayer a este diario Alfonso Escribano, responsable de la firma, su decisión de abrir el banco para ofrecer a sus donantes la posibilidad de emplear en un futuro las células madre -muy abundante en la sangre inmadura de los recién nacidos- para tratar enfermedades que eventualmente puedan padecer. Ya se ha extraído, congelado y conservado sangre del cordón umbilical de dos recién nacidos en la clínica de la Salud de Valencia, según Escribano. Fuentes de este hospital admitieron tener conocimiento de las extracciones, cuya responsabilidad limitaron "a la decisión del paciente y al médico". La empresa cobra 120 euros al mes por el almacenaje a 198 grados bajo cero, "o 1.500 euros por 25 años", apunta el responsable de la firma. Escribano comenta que ha invertido un millón de euros en las instalaciones y que ha tenido ayudas del Instituto Valenciano de la Pequeña y Mediana Empresa, dependiente de la Generalitat.

El Ministerio de Sanidad considera esta práctica ilegal, ya que la Ley de Trasplantes -que regula los bancos de sangre, incluidos los de cordón umbilical, todos ellos públicos- establece que éstos deben ser no lucrativos.