El 63% de los andaluces respalda que se regule el consumo de alcohol

El 64,3% de la población andaluza respalda que la Junta de Andalucía regule el consumo de alcohol en la vía pública y el 62,7% de los jóvenes entre 14 y 31 años está de acuerdo con que se habiliten zonas específicas con los servicios necesarios para hacer los botellones. Son los datos que se desprenden de un estudio elaborado por la Consejería de Gobernación sobre la aceptación que tendrá en la población la ley del botellón que está redactando.

El estudio también refleja que el 40% de los andaluces se considera directamente afectado por este fenómeno social, que los entrevistados consideran una "cultura" y no una "moda".

La población se ha dividido, para realizar este estudio de opinión, entre mayores y menores de 31 años. A los primeros se les considera afectados y a los segundos participantes. Tanto unos como otros manifiestan que es necesario prohibir que se abandonen envases y restos de bebida en la vía pública y también que se prohíba hacer las necesidades fisiológicas en la calle.

El 63% de los jóvenes piensa que molestan a los vecinos y que sus acciones influyen mucho o bastante sobre el derecho al descanso. Entre los afectados, el 50% entiende que afecta mucho al descanso de la población que reside en las zonas de botellón y el 35% opina que bastante.

El 61% de los andaluces entre 14 y 31 años acude al botellón los fines de semana, el 89% el sábado. Y explican que lo hacen porque es barato. Casi el 60% acude al lugar de la concentración en coche o moto y cuando se van el 90% se dirige a discotecas y bares. El 71% de los jóvenes considera que este tipo de reuniones afecta mucho o bastante al número de accidentes de tráfico.

Ciudades del ocio

Evangelina Naranjo, la consejera de Gobernación, señaló que el estudio demuestra que los andaluces respaldan la futura ley sobre potestades administrativas en materia de actividades de ocio en espacios abiertos. Naranjo señaló que la Junta está dispuesta a conceder ayudas económicas a los ayuntamientos para que habiliten "ciudades del ocio".

La consejera desea que la ley se tramite por vía de urgencia en el Parlamento autonómico para que pueda entrar en vigor a finales de este año. En este sentido, animó a los ayuntamientos a "ir preparando sus ordenanzas" porque, cuando la ley se apruebe, el botellón será "ilegal" y las corporaciones tendrán que "evitarlo". Naranjo recordó que se establecerán sanciones económicas que van de los 100 euros a los 30.000 euros.

La consejera de Gobernación instó a los ayuntamientos a dialogar con sus ciudadanos para alcanzar acuerdos sobre la ubicación de los botellódromos.

Con respecto a la situación actual, el 40% de los jóvenes y también de los afectados cree que los ayuntamientos son permisivos a la hora de actuar con el fenómeno y entienden que son las administraciones locales las que deben regular la actividad. Sobre la nueva legislación, las opiniones están divididas: el 52% de los participantes piensa que ayudará poco o nada a resolver los problemas y el 47% dice que ayudará en gran parte o totalmente.

Los lugares de celebración del botellón suelen ser fijos. Uno de cada dos participantes acude siempre al mismo lugar y cuatro de cada diez lo alterna. Sólo el 6% cambia continuamente de lugar. En este estudio se han entrevistado a 800 jóvenes de entre 14 y 31 años que suelen participar en el botellón y 600 entrevistas a andaluces mayores de 31 años.