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Una docena de tornados sacuden el litoral catalán en tres días

El aeropuerto del Prat recupera la normalidad tras vendavales que desplazaron dos aviones

La perturbación que ha afectado a Cataluña en los últimos tres días ha desencadenado una docena de tornados, el último de los cuales dejó en la mañana de ayer importantes destrozos en Mollet del Vallès (Barcelona). Ayer, el aeropuerto del Prat recuperó la normalidad tras verse afectado por otros dos tornados en la noche del miércoles que obligaron a cerrar sus instalaciones durante una hora y llegaron a desplazar una estructura de cinco toneladas y dos aeronaves. El resto de tornados no causaron destrozos, al producirse delante de la costa.

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El tornado de ayer sorprendió a los vecinos de Mollet del Vallès pasadas las 9.30, informa Sílvia Marimon. En apenas diez minutos arrancó el techo del centro cívico de Can Pantiquet y de las cocheras de una empresa de autocares, provocó un escape de gas, rompió ventanas, derribó un muro de unos 25 metros, arrancó de cuajo árboles y provocó destrozos importantes en viviendas, equipamientos municipales, vehículos, terrazas y tejados. No hubo que lamentar daños personales.

Los vecinos de los tres barrios más afectados, la Estació de França, la Riera Seca y Can Pantiquet, asistieron incrédulos al espectáculo del tornado, que después siguió su camino por las poblaciones de Santa Perpètua de Mogoda, la Llagosta y Montcada i Reixac, sin provocar daños importantes. A Juan José Nieto, vecino de la zona, el fenómeno le pilló en plena calle: "Escuché un ruido y luego vi cómo el viento arrancaba un árbol y lo retorcía, me agarré a la pared y pensé que estaba en América; lo pasé mal, tuve un miedo enorme". Otra vecina pensó que "se hundía la habitación". El alcalde de Mollet, Josep Monràs, anunció en la tarde de ayer que el Ayuntamiento pedirá ayuda económica a la Generalitat y a la Diputación de Barcelona para paliar los daños causados por el tornado

Nuevas tormentas registradas en la tarde de ayer obligaron a los bomberos de la Generalitat a realizar hasta 72 salidas. El tornado de Mollet llegaba apenas 12 horas después de que otros dos fenómenos similares afectaran el aeropuerto del Prat y paralizaran su actividad durante una hora, informa Glòria Ayuso. Además de desplazar dos aviones sin ningún pasajero a bordo, los tornados arrastraron unos metros el sistema de radioayuda de la tercera pista, "una estructura metálica de más de 5.000 kilos de peso y 20 metros cuadrados de superficie", explicaron ayer fuentes de AENA. Los vientos alcanzaron los 125 kilómetros por hora.

La tormenta se llevó por delante placas del techo de la pasarela que conecta el aparcamiento con la terminal C de las instalaciones, utilizada por el servicio de puente aéreo. La peor parte se la llevó el personal de tierra de las compañías dedicadas a los servicios que se realizan a pie de pista, como la recogida de equipajes. El viento arrastró furgonetas y vehículos, los contenedores de mercancías y su contenido y las escaleras para subir a los aviones. El tornado destrozó la estructura de varios hangares de la terminal de carga. El fenómeno obligó a paralizar el aeropuerto y a cancelar finalmente un total de 42 vuelos y a realizar 13 desviaciones. Otros 162 aviones despegaron o aterrizaron con más de una hora de retraso.

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En el sur de Cataluña, el viento y las intensas lluvias también obligaron a los bomberos a realizar una veintena de salidas, informa Oriol Aymí. El Vendrell (Tarragona) registró precipitaciones que llegaron a acumular 111 litros por metro cuadrado. En la tarde de ayer otra fuerte tormenta en la comarca del Maresme (Barcelona) arrastró a 16 vehículos que se encontraban estacionados en la riera de Sant Jordi del municipio de Montgat.

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