Golazo y al hospital

David Beckham marcó un golazo, vio una tarjeta y se rompió una costilla tras recibir un golpe en apenas unos minutos. El centrocampista del Madrid acabó en el hospital, donde se le realizaron unas pruebas para ver el alcance de su dolencia. Unas radiografías que confirmaron la rotura de una de sus costillas.

Antes, la selección de Inglaterra se impuso con claridad a la de Gales en el duelo británico. Una victoria subrayada con un espléndido gol de Beckham de un lanzamiento muy lejano. Los ingleses arrancaron con un fútbol brillante y veloz. Tan rápido, que el primer tanto lo marcó Frank Lampard en el minuto cuatro. Para entonces, el bloque de Eriksson ya había dispuesto de varias oportunidades. Rooney, el nuevo fenómeno del fútbol inglés, probó suerte con un tiro a meta en el minuto once que a punto estuvo de aumentar el marcador, y poco después era el jugador del Tottenham Jermaine Defoe, con un disparo cruzado, el que amenazaba a Gales con la posibilidad del segundo tanto. Rooney jugó en una posición novedosa para él, unos metros por detrás de Defoe y Owen. El delantero del Madrid mantuvo su sequía goleadora, pero estuvo cerca de romperla. El portero galés, Jones, detuvo la oportunidad del ariete blanco.

En esta interminable cadena de ocasiones de las que gozó Inglaterra, no podía faltar su capitán, David Beckham, que jugó por el costado derecho. Así, poco antes del descanso, el madridista creaba peligro en el área galesa con un lanzamiento que sobrepasó el larguero. En el segundo tiempo, Beckham estuvo a punto de anotar con un disparo cruzado desde fuera del área que se fue a las manosdel guardameta. A continuación, en un segundo tiempo frenético, Owen volvió a gozar de una ocasión que también frenó Jones.

Pero otra vez la suerte se inclinó hacia el conjunto local. Esta vez fue Beckham, con un impresionante disparo lejano desde la izquierda, el que logró incrementar la ventaja y sellar la victoria para la selección de Eriksson en el minuto 76. Fue un tanto impresionante fruto de un lanzamiento lejanísmo y en parábola.

Poco después de celebrar el tanto, el centrocampista inglés cometía una falta sobre Thatcher que le costó una tarjeta amarilla. Una amonestación que le impedirá estar en el próximo partido contra Azerbayán.

Fracaso de Portugal

Portugal empató de manera sorprendente ante la débil Liechtenstein, que fue capaz de remontar dos goles en contra en los últimos minutos del encuentro. El equipo luso fue traduciendo su superioridad en goles durante el primer tiempo, cuando Pauleta, en el minuto 23, y Hasler, en propia puerta en el 38, dejaban el partido visto para sentencia. No fue así, un tanto final de Beck en el 75 ponía el sorprendente guarismo final en el marcador.