Con la uva a otra parte

Los vinos de las Bodegas Mauro vuelan. Y no sólo porque, por término medio, tienen cuatro veces más demanda que botellas para satisfacerla, sino porque las exportaciones son el pilar fundamental de la empresa. Una compañía que dirige Mariano García, que durante más de 30 años fue enólogo jefe en la mítica bodega Vega Sicilia y que, sin duda, es una de las personas más influyentes en el mundo del vino español y europeo.

En esta bodega vallisoletana las exportaciones crecen a un ritmo espectacular. Para analizar correctamente la importancia que tiene esta actividad dentro de la empresa hay que tener presente que la compañía está, por así decirlo, dividida en tres bodegas: Mauro, Maurodos y el Paixar.

Las tres bodegas Mauro, situadas en Valladolid, León y Galicia, van a facturar en conjunto este año con sus vinos unos 4,7 millones de euros

De la primera -que comercializa las marcas Mauro, Mauro Vendimia Seleccionada y Terreus- se va a exportar cerca del 40% de la producción, unas 92.000 botellas. Los principales destinos serán Estados Unidos, Japón, Suiza, Bélgica, Alemania y Puerto Rico (un país que está sorprendiendo por su repentina pasión por los caldos españoles). Todos estos números se consiguen a partir de una producción que para este año se espera que alcance unos 176.00 litros, los cuales se transformarán en 230.000 botellas y 5.000 magnums (envases de litro y medio).

Dentro de este ambiente de intensa actividad, se está construyendo una bodega nueva en Tudela (Valladolid) que estará terminada este año y en la que se han invertido unos cuatro millones de euros. El proyecto corre a cargo del arquitecto Jesús Manzanares, quien ya ha trabajado para otras empresas vitivinícolas como Enate, Pago de Capellanes, Aalto o Artadi.

En el caso de Maurodos, los números son muy similares, sólo que en esta bodega, situada en la zona de Toro, únicamente se elabora un vino: San Román, para bastantes entendidos, como el restaurador Abraham García, uno de los dos mejores vinos de esa denominación de origen. De acuerdo con las previsiones de la empresa, la producción en 2004 de este caldo -cuya demanda triplica la oferta- se situará en 39.450 litros, repartidos en 51.000 botellas y 800 magnums.

En cuanto a las exportaciones, un 45% de las botellas emprenderán viaje. ¿Los destinos? Portugal, Bélgica y Alemania. "Aunque en los últimos meses también se están abriendo oportunidades en Asia (Japón, China y Singapur), Europa Oriental, Canadá y América del Sur", analiza Mariano García, propietario, junto con sus hijos Alberto y Eduardo, de las bodegas.

Estos dos últimos están construyendo una bodega propia -Bodegas y Viñedos el Paixar- a mil metros de altitud en las estribaciones del Bierzo (León) con Galicia para comercializar el vino Paixar, del que ya exportan el 50% de las 15.000 botellas que producen y cuya demanda supera, una vez más, una oferta por ahora limitada.

En esta instalación se trabaja con pequeñas parcelas de viñas viejas de la variedad mencía situadas concretamente en las laderas pizarrosas de Dragonte, una aldea de montaña, con apenas 60 habitantes, en pleno camino de Santiago.

Para cerrar el capítulo de los números, hay que destacar que las tres bodegas juntas facturarán este año unos 4,7 millones de euros.

Una información que no ha había trascendido, pero que sin duda tiene una gran importancia dentro del sector, es que Mauro está muy interesado en el vino blanco. Tanto es así, que ya se han comprado las primeras dos hectáreas de viñas en una zona de Galicia -que Mariano García no quiere revelar, para evitar que los precios se disparen al conocerse que están comprando viñedos- con el propósito de empezar su elaboración.

"La comercialización del nuevo caldo dependerá exclusivamente de la calidad de los resultados. Si no están a la altura de nuestras exigencias no sacaremos el vino al mercado", revela el fundador de Mauro.