España negocia la venta de corbetas a Israel por 785 millones de euros

El consorcio AFCON, del que forma parte el astillero público español Izar, está pugnando por la construcción de dos corbetas para la Marina de Guerra israelí por valor de hasta 785 millones de euros (1.000 millones de dólares). La operación, que supondría la mayor venta de armamento realizada nunca por España a Israel, fue objeto de las conversaciones mantenidas la semana pasada en dicho país por el secretario de Estado de Defensa, Fernando Díez Moreno.

Además de Izar, integran el consorcio AFCON (Advanced Frigate Consortium) las compañías estadounidenses Lockheed Martin y Bath Iron Wor...

El consorcio AFCON, del que forma parte el astillero público español Izar, está pugnando por la construcción de dos corbetas para la Marina de Guerra israelí por valor de hasta 785 millones de euros (1.000 millones de dólares). La operación, que supondría la mayor venta de armamento realizada nunca por España a Israel, fue objeto de las conversaciones mantenidas la semana pasada en dicho país por el secretario de Estado de Defensa, Fernando Díez Moreno.

Además de Izar, integran el consorcio AFCON (Advanced Frigate Consortium) las compañías estadounidenses Lockheed Martin y Bath Iron Works, el astillero de General Dynamics. El buque ofrecido a Israel incorpora el sistema de combate Aegis, el más avanzado del mundo, con capacidad de defensa antimisil. Es el mismo sistema que llevan las fragatas F-100 de la Armada española y las F-310 vendidas a Noruega, aunque en una versión miniaturizada, dadas sus menores dimensiones (2.600 toneladas de la nueva corbeta, frente a las 5.800 de la F-100 y 5.115 de la F-310).

Según las fuentes consultadas, está previsto que Israel (cuya Marina dispone de tres corbetas estadounidenses de 1.200 toneladas construidas en la pasada década) tome una decisión este año. El consorcio AFCON compite con otro formado por las compañías Northrop Grumman y Raytheon, de EE UU, junto a la israelí ELTA Electronic.

La compra de las dos corbetas (con opción a una tercera) se financiará con cargo a los fondos FMS de EE UU, que sólo pueden ser utilizados para comprar material norteamericano, por lo que, de resultar ganador el consorcio AFCON, España debería negociar con Washington la participación de Izar.

La operación se trató durante la visita a Israel realizada, los pasados días 8 y 9, por el secretario de Estado de Defensa, Fernando Díez Moreno. El número dos del Ministerio de Defensa español firmó un acuerdo sobre I+D (Investigación y Desarrollo), que complementa el convenio de cooperación industrial de Defensa de 1995 y otro sobre certificación de calidad de 1997-98, además de anunciar la creación de una agregaduría de Defensa en la Embajada de España en Tel Aviv.

De consumarse la operación de las corbetas, sería la mayor exportación de material militar español a Israel. Hasta ahora, España sólo le ha vendido munición y bombas de aviación, así como componentes electrónicos, en compensación por sus compras.

Y es que, pese a la falta de reciprocidad, Israel es un importante suministrador de las Fuerzas Armadas españolas. Israel Aircraft Industries (IAI) ha realizado la modernización de los cazas F-5 por 50 millones de dólares y la adaptación de un B-707 para guerra electrónica por 21. La compañía israelí Rafael vendió equipos de designación de blancos y cámaras térmicas para los F-18 por 80 millones y Tadirán ha suministrado sistemas de comunicaciones para la Red Básica de Área del Ejército de Tierra.

Ahora, Israel está muy interesado en el proyecto del Ministerio de Defensa para adquirir vehículos aéreos no tripulados (UAV). Dos compañías israelíes, IAI y Elbit, fabrican este tipo de sistemas, que EE UU utilizó profusamente en las guerras de Afganistán e Irak. A lo largo de este año, gracias a los créditos del Ministerio de Ciencia y Tecnología, Defensa debería definir las características del UAV español, que podría desdoblarse en dos, uno estratégico y otro táctico. Las fuentes consultadas dan por seguro que se aprovechará la experiencia adquirida por el INTA, el centro de investigación de Defensa, que en los últimos años desarrolló el SIVA (un avión no tripulado de 300 kilómetros de alcance, seis horas de autonomía y 150 kilómetros de velocidad) y consideran probable que se busque un acuerdo de cofinanciación con otros países, como Francia y Holanda. Todo lo cual no excluye la participación de Israel, que ya colabora con el consorcio europeo EADS en este terreno.