El cante se va de viaje
"¡Rancapino, te van a echar de España!". Eso le gritó La Juana a su marido, el cantaor gitano-gaditano-japonés Rancapino, cuando el hombre acababa de grabar su particular versión del Bésame mucho en los estudios La Kaleta de Cádiz. El cantaor, entrañable íntimo de juergas de Camarón, había sudado lo suyo peleando con la fonética: "¡Isidro", le dijo al productor, Isidro Sanlúcar, "esto de síbala a síbala es mú difícil!".