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De la Gran Pirámide al escarabajo

Jacinto Antón

Sus pilones alcanzan los cielos y las astas de los estandartes, las constelaciones". La frase del templo de arenisca de Amenofis III en Soleb, en la Alta Nubia, se refiere a las grandes construcciones faraónicas, pero también puede aplicarse a la magnitud de la bibliografía sobre el Antiguo Egipto, una bibliografía que crece -felizmente- de manera prodigiosa. La última crecida de este fertilizante Nilo de publicaciones viene bien surtida, de la alta pirámide al humilde escarabajo (y sin embargo símbolo solar), y todo egiptófilo notará su pulso acelerarse ante tanta momia, tanta tumba, tanto sabio.

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Desde Egipto, con amor

Editado por primera vez en 1947, el libro ha conocido continuas reediciones actualizadas, hasta 1993 (la que aparece en España), lo que permitió al autor introducir, por ejemplo, el tema de los controvertidos pozos de ventilación de la Cámara de la Reina de la pirámide de Keops. Edwards fue un verdadero erudito: responsable del departamento de antigüedades egipcias del British Museum, organizador de la gran exposición en Londres sobre Tutankamón (1972) y uno de los artífices del salvamento del templo de Philae, que tantos suspiros provocó a Loti. Su obra Las pirámides de Egipto es un pormenorizado estudio científico de esos monumentos que sigue cronológicamente las etapas de su desarrollo -deteniéndose especialmente en el grupo de Giza- con un capítulo final sobre la finalidad y la forma de construirlos.

Obra de referencia, llena de interesantísimos detalles y alguna ironía anglosajona ("¡qué poco podían imaginar estos reyes las oportunidades para hacer hipótesis que estaban dando a la posteridad!"), el libro de Edwards es muy útil incluso sobre el terreno, como puede atestiguarlo quien firma estas líneas que lo llevó como guía a una estremecedora excursión en solitario a las entrañas de la Gran Pirámide en pos de las grietas que supuestamente amenazaban la estabilidad del monumento. Tiene además el libro de Edwards la honestidad de establecer los límites de nuestro conocimiento sobre las pirámides y de admitir que siguen existiendo puntos oscuros en los propósitos y métodos de su construcción que sólo podrán aclararse con más investigación y nuevos descubrimientos.

No es mala idea ya que hemos hablado de Edwards hacerse con sus memorias (From the pyramids to Tutankhamun: Memoirs of an egyptological life, Oxbow Books, 2000), pues el sabio tuvo una vida muy plena y vivió aventuras como el adentrarse en el desierto durante la II Guerra Mundial en busca de pirámides sin conocer los emplazamientos de los campos de minas. Son novedad las memorias de otro gran personaje de la egiptología: la faraona Christiane Desroches Noblecourt, que acaba de publicar Sous le regard des dieux (Albin Michel, 2003), en el que pasa revista a sus 62 años de apasionante carrera profesional.

Otras dos interesantes novedades son las que publica el sello Oberon (Anaya) en su colección de egiptología -en la que apareció el Akhenatón (2002) de Reeves, un título indispensable, y más ahora con todo el revuelo en torno a la supuesta momia de Nefertiti-. Se trata de dos serias monografías sobre temas religiosos: Ra, el dios del sol -que posee un muy interesante capítulo sobre, precisamente, Akenatón y otro sobre el significado solar de pirámides y obeliscos- y La religión en el Antiguo Egipto -que incluye un capítulo sobre los dioses egipcios en el extranjero-, ambos de Stephen Quirke, conservador del Petrie Museum de Londres. Otra novedad sobre las divinidades egipcias es el estudio iconográfico de María José López Grande, Damas aladas del antiguo Egipto (Museo Egipcio de Barcelona, 2003).

Para el final queda uno de los libros que más expectación despertará entre muchos aficionados: la Guía del Antiguo Egipto (Planeta, 2003) que ha pergeñado el novelista Christian Jacq y que constituye un agradable y oportuno acompañante para viajar, con documentación, consejos y el tono entusiasta del autor, a los parajes arqueológicos más conocidos del país.

Beduinos, en un oasis con las pirámides de Gizeh al fondo, en una foto de 1869.
Beduinos, en un oasis con las pirámides de Gizeh al fondo, en una foto de 1869.ADOLPHE BRAUN

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Sobre la firma

Jacinto Antón
Redactor de Cultura, colabora con la Cadena Ser y es autor de dos libros que reúnen sus crónicas. Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona y en Interpretación por el Institut del Teatre, trabajó en el Teatre Lliure. Primer Premio Nacional de Periodismo Cultural, protagonizó la serie de documentales de TVE 'El reportero de la historia'.

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