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Un grupo de arqueólogos denuncia que se le impide excavar una fosa de la Guerra Civil

Los estudiosos achacan a presiones de Presidencia la negativa del alcalde de Albinyana

Jacinto Antón

Un equipo de arqueólogos, historiadores y forenses de universidades de Barcelona (UB), Tarragona (Rovira i Virgili) y Granada, que tenía previsto iniciar hoy mismo la excavación de una fosa común de la guerra civil en Albinyana denunció ayer que el alcalde de la localidad, Joaquim Nin, de CiU, les ha negado el permiso para efectuar la investigación. El equipo, del que forman parte Eudald Carbonell, codirector de Atapuerca, y el artista multimedia Francesc Torres, achaca a presiones del Departamento de Presidencia de la Generalitat la negativa del alcalde.

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El Departamento de Presidencia reconoció haber aconsejado a Joaquim Nin que no diera el permiso para la excavación, aunque fuentes del departamento insistieron en que el responsable último de la decisión es el propio alcalde.

El proyecto, patrocinado por las respectivas universidades implicadas, la Fundación Fullbright de Washington y la American Center Foundation de París, consistía en excavar y documentar una fosa común del antiguo cementerio de Albinyana (Baix Penedès), hoy en desuso, a la que fueron lanzados los cadáveres de medio centenar de soldados republicanos el 20 de enero de 1939, tras varias horas de duros combates con las fuerzas franquistas. La excavación pretendía recuperar, a lo largo de una o varias campañas, los restos, identificar a los soldados caídos, extraer el máximo de información histórica (edad, estado físico de los soldados en el momento del fallecimiento, objetos personales) e identificar la causa exacta de la muerte (en combate, heridas, ejecución). Estaba previsto obtener muestras de ADN de cada individuo para dejar abierta una posible recuperación de los restos por parte de los familiares. Los cuerpos habrían sido devueltos al cementerio tras su estudio, en tumbas individualizadas y a la espera de la decisión sobre su destino final en caso de ser reclamados por familiares. El proyecto contaba con la colaboración del conocido artista multimedia Francesc Torres, que iba a realizar un seguimiento iconográfico de la excavación que se incorporaría a próximas exposiciones internacionales sobre la guerra y la paz. Torres se había comprometido a realizar en el mismo lugar un monumento a los soldados muertos. "Parece que finalmente nunca sabremos cuántos murieron, ni qué edad tenían, ni si fueron asesinados después de rendirse; tampoco sabremos sus nombres", manifestaron ayer desolados los especialistas en patrimonio Joan Santacana y Xavier Hernández, de la UB, miembros del proyecto. Los estudiosos se sienten engañados por el alcalde de Albinyana, quien tras diversas conversaciones aplazó la decisión última hasta después de las elecciones, y el viernes pasado dijo definitivamente que no. "Ahora, con el equipo desplegado y a punto de empezar a trabajar, el alcalde se niega a dar la autorización", lamentan los investigadores, que critican que un "affaire científico pase a ser político". Y es que, según afirman, el alcalde les dijo "que debía asesorarse con Presidencia, que es el departamento sobre el que la Generalitat ha hecho recaer la problemática de las fosas comunes de la guerra civil, y que de esta instancia ha recibido recomendaciones de que no es oportuno, que no es el momento de excavar". Joaquim Nin ha manifestado al Diari de Tarragona que la apertura de la fosa no es prioritaria, pues está documentada y se sabe ya de su existencia. El alcalde opina que basta con incluirla en el inventario oficial de fosas, y remite al trabajo en ese sentido que la historiadora Queralt Solé realiza desde la Generalitat. La idea es que sólo después de trazar el mapa de localización de fosas en el territorio se pueden decidir actuaciones concretas -incluso la excavación- para cada caso, como es el del cementerio de Albinyana. La posición de la Generalitat es que no se puede excavar sin control.

Hernández y Santacana consideran inexplicables las trabas a un equipo prestigioso como el que se ha reunido, "dotado con todas las garantías científicas", y consideran que la negativa tiene un trasfondo político. "Se ve que el asunto de la fosa común no es popular en Albinyana", opinan los investigadores, que atribuyeron también la negativa a "un cierto nerviosismo ante la posibilidad de remover un pasado que puede no gustar en algunas bases de CiU que habrían comulgado con el franquismo sociológico".

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Sobre la firma

Jacinto Antón
Redactor de Cultura, colabora con la Cadena Ser y es autor de dos libros que reúnen sus crónicas. Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona y en Interpretación por el Institut del Teatre, trabajó en el Teatre Lliure. Primer Premio Nacional de Periodismo Cultural, protagonizó la serie de documentales de TVE 'El reportero de la historia'.

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