"Mi problema no es el dinero, sino la felicidad"
KARMENTXU MARÍN
Con casi 52 años y tres hijos, es un hombre simpático y reidor, que dice no tener más aficiones importantes que "componer y escribir". Asegura ser un hombre muy familiar, amante de la lectura, y entretenerse llevándose a sus hijos a hacer esquí acuático. Antes construía trenecitos, pero ahora ya no lo hace: "Tendría que llevarme todas las piezas a Suiza".