La liberación de Botero
Hay gente, como Santiago Botero, el increíble colombiano, que sólo entiende el ciclismo de forma exagerada. Gente, como Botero, el ciclista rubio de Medellín, que se prepara ocho meses de forma exagerada, trabaja y trabaja, reduce su vida al ciclismo, todo el año, en altura y en llanura, en el gimnasio y delante de un plato, pero gente que no se siente máquina, gente con alma.