Moratinos dice que 'no hay solución militar para el terrorismo'

'Es indudable, e incluso lo reconocen miembros del Gobierno de Israel, que no hay solución estrictamente militar al problema del terrorismo', manifestó ayer el enviado especial de la UE a Oriente Próximo, Miguel Ángel Moratinos, tras condenar el atentado que causó 16 muertos. 'La segunda Intifada no ha dado ningún buen resultado. Cada atentado en Israel hace que la causa palestina pierda posiciones', dijo.

El diplomático español dirigió estas últimas palabras al representante de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en Madrid, Nabil Marouf, que, previamente, había justificado la violencia de su pueblo, aun condenando los atentados indiscriminados contra civiles, como 'una reacción natural' frente a la ocupación israelí. El debate, al que el embajador de Israel, Herzl Inbar, se limitó a añadir que el nuevo terrorismo no admite soluciones negociadas, sino sólo la derrota, se desarrolló en el marco de un seminario sobre La amenaza del siglo XXI, organizado en Toledo por la Asociación de Periodistas Europeos.

Moratinos insistió en que el atentado 'vuelve a demostrar que hay muchos interesados en que no den resultado los esfuerzos diplomáticos' de la comunidad internacional, pero se mostró confiado en que se logre llegar a alguna negociación. La buena disposición expresada por la ANP para controlar la violencia y el consenso concretado en el llamado Cuarteto, integrado por EE UU, Rusia, la UE y la ONU, son los dos 'nuevos elementos' con los que el embajador europeo explicó su optimismo de que se pueda entablar algún tipo de diálogo 'antes de junio'.

La mediación externa, que Moratinos consideró indispensable, se centra en estos momentos en acortar distancias entre los países árabes, que sólo admiten sentarse con los israelíes si el diálogo tiene objetivos y límites precisos, e Israel, que quiere un nuevo punto de partida sin condiciones.

'La paz no me parece imposible, porque lo vi en Taba hace dos años. Si a la sociedad israelí se le hace una oferta sólida, puede aceptar volver a las fronteras anteriores a 1967, con pequeñas correcciones', aseguró Moratinos.